Las previsiones que vaticinaban un descenso perceptible del precio del óleo para la próxima campaña (se llegó a charlar de una caída hasta los 4,5 o 5 euros por litro en origen), parecen disiparse; o, al menos, pierden fuerza. Y ello a pesar de que las estimaciones de producción indican que se puede durar a las 271.000 toneladas en la provincia, casi un 79% más.
Así lo pronostican voces del sector aceitunero cordobés, que prefieren mantenerse cautas y se inclinan a considerar que los precios «se van a ayudar en un nivel aceptable», como el secretario genérico de Asaja, Rafael Navas, que califica de «corriente y previsible» que se espere un aumento de la producción, «porque la campaña antecedente fue muy mala» [unas 800.000 toneladas].
No obstante, Navas advierte que, «a pesar de tener desencajado de una sequía tan mala» y de que «las lluvias de primavera ayudaron», aún persiste la problemática con el agua. «Las precipitaciones caídas no fueron suficientes y los árboles siguen sometidos a estrés hídrico», ya que, aunque los olivos en riego aguantan más, los de sequío, que son la mayoría, «lo están pasando muy mal sin agua desde primavera».
En este sentido, aunque la cosecha llegue a aventajar a la del año pasado, «siquiera será una gran cosecha. Sí es cierto que permitirá proveer al mercado de forma suficiente, pero no creo que afecte demasiado al precio; experimentará algunos ajustes y serán aceptables para el agricultor, pero no lo que se estimó en un primer momento». Adicionalmente, el stock de enlace es bajo, poco que preocupa al sector aceitunero (por debajo de las 200.000 toneladas).
En la misma andana se pronuncia Rafael Sánchez de Puerta, director genérico de Dcoop y presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de Córdoba: «La previsión de producción para la campaña 2024/25 de la Grupo es muy similar a la que hicimos hace unos días. Otra cosa es que se malogre por la situación climática. Para que esto no pase es necesario que el año sea ‘corriente’, y hemos arrancado con un otoño muy seco, y el olivo está sufriendo de guisa significativa».
En cuanto a los precios, Sánchez de Puerta señala que «es difícil anticipar cómo se van a comportar, porque dependen de varios factores: primero, del climatológico; y asimismo, de cómo se recupere el mercado». En este sentido, el consumo de óleo de oliva en 2023 sufrió un severo descenso respecto a títulos de abriles anteriores, aunque en el caso del óleo casto extra aún se mantiene por encima de registros de hace diez abriles.
En cuanto a las exportaciones, en la última campaña volvieron a descender respecto a la campaña antecedente, no obstante aumentaron en valencia más de un 19% (datos de toda la comunidad).
El casto extra, a 7,2 euros el litro en origen
En cualquier caso, «con un extensión tan cabal no esperamos una caída muy importante de los precios», indica el presidente de Cooperativas Agroalimentarias de Córdoba.
Según el postrer referencia de coyuntura agraria, el coste en origen de un kilo de óleo de oliva casto extra se ha situado esta semana en 7,2 euros el litro. El casto se paga a 6,9 euros y el casto extra ecológico está a 7,4 euros.
El estado fenológico dominante en la provincia de Córdoba es ‘H’ (endurecimiento del hueso) y como más avanzado ‘I1’ (envero, amarilleo). Continúa el verdeo de la variedad hojiblanca en la zona sur y oeste-central de la provincia, «con un incremento paulatino de las cotizaciones, ya que la ofrecimiento no es muy espacioso pues sólo se pueden acopiar aceitunas adecuadas procedentes de tierras de riego o de secanos muy frescos puesto que con la meteorología presente (calor sin precipitaciones) la oliva acelera su ciclo y vira de color más rápidamente», recoge el referencia de la Grupo.
En la provincia de Córdoba, hay 376.400 hectáreas de olivar, según datos del Sigpac, con una progreso creciente en los últimos abriles. Existen cuatro denominaciones de origen, Baena, Priego de Córdoba, Montoro-Adamuz y Lucena. El valencia de la producción final del olivar supuso el pasado año el 48% del total de la rama agraria.