Eliot, de 9 primaveras, ha noble la mano desde el fondo de la clase para contestar a un agente tutor que preguntaba qué es el ciberbullying. Sin dudarlo, este pequeño explica a sus compañeros que «es cuando tu estás en el Whatsapp y cualquiera empieza a decirte que eres un fracaso, que no sirves para falta, te lo repiten, te pones triste y empiezas a sollozar». Es una de las reacciones de un discípulo de 4º de Primaria del centro diocesano San Rafael en La Fuensanta- donde la mayoría ha agradecido tener móvil propio- a una charla de los agentes tutores de la Policía Lugar Paco e Isabel encargados de organizar el acoso escolar, el ciberacoso y los peligros de internet.
La charla comienza a segunda hora de clase. Los agentes tutores entran en el cátedra y uno de los niños le da los buenos días y dice: ¡No dispare!, mirando el arsenal de estos agentes uniformados. Es una de las anécdotas a las que se enfrentan cada día estos policías locales encargados de este plan que progreso la convivencia en los centros del que acento el oficial coordinador de la mecanismo Juan Jesús Alcántara que cumple diez primaveras desde su puesta en marcha.
«Cada vez hay anciano demanda por parte de los centros educativos —el pasado año impartimos 400 charlas— e intentamos estar más cerca de la comunidad educativa, además atendemos a los padres siempre a través de los colegios; es una mecanismo que ha quedado para quedarse -igual que Educación Viario o Tráfico». Las charlas están dirigidas a niños, dependiendo de la perduración, y se adaptan en contenidos. Por ejemplo no le vas a charlar de violencia de existencias a uno de cuarto de primaria o de pornografía… pero sí de delitos de odio o ciberacoso. «Lo que ocurre es que en ese acercamiento entre agentes tutores y alumnos en sus clases, se sientan cómodos y llegan a contar sus propios problemas.
De estas charlas surgen los seguimientos a esos casos, abunda Jiménez. «El pasado curso fueron 84 menores atendidos contiguo a su grupo para lo que se necesitaron 622 seguimientos para solucionar el problema. la mayoría estaba relacionado con el uso de pantallas e internet».
Uno de los casos más graves abordado por esta patrulla de agentes tutores el pasado curso fue la de un párvulo de 5º de Primaria que confesó al final de la clase entre sollozos lo que le ocurría. Le mostró sus brazos con cortes que se tapaba con manga larga llevando sudadera… incluso cuando hacía calor. «Este párvulo no quería charlar con nadie, sus padres no tenían ni idea de lo que pasaba ni siquiera el tutor, pero sí me llamó al final de la charla para charlar conmigo porque le inspiré confianza», cuenta la agente tutora Isabel, en su cuarto año en esta mecanismo de la Policía Lugar de Córdoba que enseña contiguo a Paco con un jerga claro y didáctico cómo ampararse de los delitos cometidos a través de internet.
Un agente tutor muestra las cámaras de un móvil a los niños para advertirles que pueden ser grabados
La charla en el colegio San Rafael comienza con una pantalla donde muestran los juegos más comunes entre los niños de esta segunda etapa de Primaria como Roblox, Fornite, Minecraft, Fifa, Tiktok… La agente tutora pregunta quién los conoce y la respuesta es masiva, todos con la mano hacia lo alto. La agente le cuenta que cómo pueden tener comunicación a Tik-Tok o Fornite cuando la perduración mínima es de 13 primaveras, pese a tener 9 primaveras. «Los agentes Isa y Paco venimos a advertir de algunos peligros que con cosas que haceis a diario podemos meternos en un problema», comienzan a charlar frente a la ojeada atenta de los niños.
El agente tutor Paco les asegura que internet es «una útil que correctamente usada es magnífica pero mal usada puede dar muchos problemas». El agente Paco pregunta a Siri, cuánto mide la retrato…y le contesta que tiene un dominio de 38 millones de kilómetros. Ese es el costado bueno de internet pero le recuerda a los niños que detrás puede deber clan mala. Los agentes le muestran uno a uno los siete peligros de estar en red.
Nunca se acento con desconocidos en la red
El primero de ellos que las cuentas de los niños no deben mostrar ni su nombre ni su perduración. «Ya si tenéis cuenta propia en Tiktok habéis mentido porque nadie tenéis 13 primaveras». «En las imágenes de perfil nunca hay que poner vuestra foto, sois menores y pueden utilizar vuestra carita para poneros un cuerpo diferente y luego chantajearlos y pedir más fotos íntimas. No habléis con desconocidos a través de las redes; hay que poner un paisaje, tu mascota o el escudo de tu equipo de fútbol», cuenta esta agente que incide en que la anciano advertencia a estos niños de 4º curso de primaria es que no hablen nunca por internet con desconocidos.
«En Robolox hay avatares que buscan novios y aparecen con las siglas contiguo a la figura (NV); si no le dais los buenos días… a una persona que no conoces ni los miras por qué hacerlo en la red». Los agentes tutores les explican que detrás de un sujeto que se vehemencia Spiderman puede deber un hombre malo de 45 o 50 primaveras que no tenga buenas intenciones.
La recomendación es que en los juegos siempre sepa con quién articulación, que sea mi amigo, mi vecino o mi primo… nunca con un nombre que no sabes quién se esconde detrás. Otra de las recomendaciones de estos agentes es que no cuelguen fotos de las ocio en los estados en el mismo momento porque da pistas a los ladrones de que la casa está vacía y pueden emplear para entrar como les ha pasado a los famosos futbolistas. Las redes, por otra parte llevan a la pérdida de habilidades sociales y provocan irritabilidad, y mal uso del jerga.
Menos de la parte de los niños de la clase de la tutora admitieron que si salen con sus padres a tomar y ven niños al costado no se levantan a pedirles corretear con ellos.