Asaja de Castilla-La Mancha ha pedido a la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural más información y transparencia en relación a la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) que afecta principalmente a la granjas de ganado y poblaciones de venados, dada la enorme preocupación de los ganaderos por conocer el alcance de la misma y la necesidad de establecer un protocolo de actuación.
La organización agraria indica que esta enfermedad transmitida por un mosquito del género Culicoides no afecta a los humanos, pero produce síntomas moderados y autolimitados en el ganado bovino (fiebre, anorexia, disfagia, emaciación, estomatitis ulcerosa, cojera, dificultad respiratoria y eritema de la ubre), provocando la muerte en algunos casos.
Para detectar la enfermedad, los ganaderos se ven obligados a controlar el ganado diariamente realizando tareas de fumigación aislamiento de animales que presenten síntomaslo que conlleva un incremento de los gastos inherentes a su alimentación, en los casos de ganadería extensiva.
Asaja de Castilla-La Mancha asegura que toda esta gestión del ganado conlleva costos adicionales en personal, así como, en medicamentos y en productos de desinfección y desinsectación.
A todo esto se le suman los animales que mueren a causa de la enfermedad, que suele ser un promedio de 5 animales por granja además de los abortos, no poder prever las consecuencias de esta enfermedad en la paridera del próximo año ya que el animal que pasa la enfermedad permanece muy débil y el que no pasa está sujeto a un estrés adicional en plena cobertura.
Es por ello que Asaja Castilla-La Mancha ha solicitado un protocolo de actuación al Ministerio de Agricultura que prevé indemnizar a los agricultores afectados, que vienen atravesando un año de enormes dificultades debido a la sobrecostos de producción debido a la sequíaasí como, en granjas de cazaademás de una mayor flexibilidad en la medicación de estos animales para evitar una mayor mortalidad.
En este sentido, la Organización también ha hecho un llamamiento a la responsabilidad del sector recomienda que los ganaderos notifiquen inmediatamente a los servicios veterinarios oficiales cualquier sospecha de la enfermedad en especies susceptibles adoptando, desde el inicio, medidas de desinsectación en animales e instalaciones como sistema de lucha contra el vector.
Desde la aparición de la enfermedad en España ya se han registrado unos 30 casosrepartidos por diferentes provincias de comunidades autónomas como Andalucía, castilla la manchaExtremadura y, recientemente, en Castilla y León.
La localización de los focos implica Restricciones a los desplazamientos directos de por vida (no para sacrificio) por parte de EHE a otros Estados miembros de bovinos, ovinos y caprinos, de conformidad con lo dispuesto en el Reglamento Delegado (UE) 2020/688 de la Comisión, de 17 de diciembre de 2019, por el que no se establece ningún tipo de restricción en relación con el movimiento o consumo de productos de estos animales (carne , leche, piel, etc.).
En cuanto a los movimientos nacionales, los animales y los vehículos deben ser desinfectados para los movimientos de la zona afectada a la zona libre, sin síntomas en bovinos.