A filtro de computadora durante la anterior legislatura del Gobierno de la Generalitat Valenciana -presidida por Ximo Puig y con el Departamento de Educación dirigido por Compromís- denegado a los padres su petición de Más clases en castellano para sus hijos en la escuela, aunque había menos de uno el 4% de los valencianohablantes, de acuerdo a encuestas elaborados por las propias familias.
En un alegato por la libertad de elección de la lengua de aprendizaje, la asociación familiar Lenguas y Educación ha desvelado estas encuestas tras saltar el controversia debido al posible cambio de la ciudad de Alicante para que se considere una zona predominantemente hispanohablante.
Una posibilidad contra la que se rebelan tres instituciones académicas vinculadas a la Universidad de Alicante, la entidad Escola Valenciana y algunos sindicatos, entre otros, y que también ha desatado una recopilación de empresas.
Frente a esta postura, Lenguas y Educación sostiene que esta posible modificación de la Ley de Uso y Enseñanza del Valenciano sí refleja fielmente lo que se vive en la comunidad educativa. «Los alicantinos de hoy nacen donde quieren y eligen la lengua en la que se entienden porque, de momento, están gratis hacerlo”, argumentan.
En esas encuestas a madres y padres de varios colegios de Alicante quedó claro que “el porcentaje de lengua materna valenciana no llega en ningún caso al 4% de los niños” y esta asociación invita a consultar los resultados en su web.
La Consulta de Lenguas en Educación (COLE) se realizó a través de un modelo con formulario estándar utilizado en los centros para estas encuestas. En el caso del CEIP La Albufereta, la distribución de las lenguas vehiculares -para las materias troncales, no para la asignatura de valenciano- “estaba lejos de lo que querían los padres”, por lo que solicitaron el nivel Básico 2, que era el mínimo que permitió la polémica decreto de multilingüismo, protestó durante mucho tiempo. Sin embargo, “el centro desarrolló la Proyecto Lingüístico de Centro (PLC) en el nivel Intermedio 1, justificando que el sistema informático del Departamento utilizó un filtro que no permite seleccionar niveles inferiores para esa escuela”, según Idiomas y Educación.
El informe de la AMPA La encuesta arrojó que los padres querían el 12,8% del valenciano -antes de aumentarlo ya tenían el 26,7%- y que esa lengua era válida como lengua materna en el 2,06% de los hogares. En cuanto a Inglésdemandaron el 33,87%, aunque el Ministerio indicó que sólo contaba con el 3% de docentes con competencia en esa lengua.
Resultados similares se obtienen en la encuesta del CEIP La Almadraba, con una tasa ligeramente superior de familias valencianohablantes -un 3,7%- y una mayor demanda de inglés (38%). Y allí también funcionó el filtro que impedía a las familias elegir un nivel inferior de clases de valenciano.