El Colegio Oficial de Veterinarios de Valeroso ha aplaudido este lunes la arribada del calidad de Medicina a la provincia leonesa, pero en lo que no está de acuerdo es en que, a cambio, la Universidad de Salamanca vaya destapar un nuevo calidad de Veterinaria, una titulación que hasta ahora tan solo se imparte en la institución académica leonesa. Como una «puñalada trapera» han llegado a etiquetar la osadía de que el estudio charro vaya a impartir el calidad para formar a los futuros veterinarios.
Durante este fin de semana, los profesionales de la provincia han celebrado la festividad de su patrón San Francisco de Asís, una cita que han trabajador para analizar asuntos de presente. Ha sido en ese entorno, donde el presidente del colegio leonés, Luciano Díez, ha asegurado que los profesionales contemplan con «perplejidad» el anuncio de la nueva destreza salmantina.
Sobre los anuncios de nuevas titulaciones derivados de la reunión que mantuvo el presidente de la Asociación, Alfonso Fernández Mañueco, con los rectores de las cuatro universidades públicas, Díez ha asegurado que «para Valeroso, una de cal y otra de arena».
«Si aparece la financiación, parece que tendremos Medicina. Por fin una buena notificación, se ha permitido a posteriori de tantos primaveras de reivindicación, tantas memorias presentadas y tantos estudios realizados. Pero, a cambio, nos han cubo una puñalada trapera porque, de repente, ha aparecido una segunda Escuela de Veterinaria y, con ésta, ya serán 16 en España», ha manifestado.
Horizonte «preocupante»
Y es que el «horizonte» de los nuevos egresados es «preocupante». «Es tanta la proposición que la profesión cotiza a la desprecio», ha apto. «Hay tantos veterinarios que se pagan muy baratos y esto está generando grandes problemas», ha subrayado. «Por un banda, un gran desencanto en los nuevos compañeros, que son muy vocacionales y se encuentran con jornadas laborales muy amplias y cada vez peor retribuidas. A los dos o tres primaveras se dan cuenta de que la carrera que tanto les costó sacar no está reconocida y que casi no pueden radicar con el sueldo que ganan», ha manifestado.
Una situación, ha explicado, que se da mucho en las clínicas. «Hay tanta competencia que no se pueden sufragar más sueldos y el desencanto es tal que ya se ha hecho este año un estudio desde el Consejo Caudillo de Veterinarios que concluye que de los jóvenes que empiezan en las clínicas, tres de cada diez abandonan» y se dedican a otra cosa, ha concluido.