El Senado reprueba las “negociaciones opacas” de Pedro Snchez con quienes “quieren dinamitar el Estado”


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Rechaza una amnistía en beneficio de los procesados ​​por el ‘procés’ y sentencia: “Los españoles no merecemos un Gobierno que nace éticamente viciado”

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Pedro Sánchez, durante un pleno en el Senado en la pasada legislatura.JAVIER BARBANCHO
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El Senado, dominado por la mayoría absoluta del PP, ha abierto el camino a una oposición frontal a un eventual pero muy probable Gobierno de Pedro Sánchez apoyado por los partidos minoritarios que pretenden “dinamitar el Estado”. Y lo ha hecho coincidiendo con la designación por parte del Rey de Sánchez como nuevo candidato a la investidura.

La Cámara Alta ha aprobado, con 139 votos a favor contra 107 en contra, una moción de desaprobación de las “negociaciones opacas” del líder socialista para intentar formar un Ejecutivo con la “imprescindible participación” de Junts, cuyo líder, Carles Puigdemont, recuerda “Es un conocido prófugo de la Justicia tras haber liderado el frustrado proceso de secesión ilegal de Cataluña en 2017.” Los socialistas, a través de su portavoz Eva Granadoshan calificado la propuesta de “vieja” mientras que Junts, por boca de su representante, Josep Llús CleréSí, ha asegurado que se trata de un “movimiento en blanco y negro con música del Nodo”.

Las mociones son una figura parlamentaria cuyas resoluciones no exigen su cumplimiento por parte del Ejecutivo sino que expresan la posición del poder legislativo, en este caso la de una de sus dos cámaras. Sin embargo, en el plazo de seis meses el Gobierno deberá informar sobre su cumplimiento.

En esta ocasión, el Senado ha rechazado de plano la concesión de una ley de amnistía que, asegura, “no encaja en absoluto en la Constitución” porque va en contra de la “prohibición expresa de los indultos generales”; “choca frontalmente con la sujeción de los poderes públicos a la ley” y vulnera “la prohibición de la arbitrariedad, la independencia judicial en el marco de la separación de poderes, la seguridad jurídica o el principio de igualdad entre los ciudadanos”.

“Los españoles no merecemos un Gobierno que nace éticamente viciado y cuya supervivencia quedará permanentemente condicionada por quienes intentaron, hace apenas seis años, romper mediante un acto de fuerza el orden constitucional y la propia integridad de España, que han nunca demostrado.” el más mínimo signo de arrepentimiento, y que no se cansen de repetir que lo intentarán de nuevo tan pronto como tengan la oportunidad”, señala el texto aprobado.

El “prestigio” de la democracia

La moción subraya que lo que está en riesgo es “la integridad y el prestigio de nuestro sistema democrático, que se vería gravemente dañado en el caso de que las Cortes Generales llegaran a aprobar una ley de amnistía más o menos encubierta y que supusiera “tomar “Por supuesto que lo injusto no fue la actuación de los líderes políticos del intento secesionista de 2017 en Cataluña, sino la sentencia del Tribunal Supremo que los condenó”.

La Sala lamenta que el motivo de este “despropósito” sea la necesidad de un candidato a la presidencia del Gobierno “cuyo partido haya perdido las elecciones” pero “está dispuesto a todo para no perder el poder”.

En este sentido, el Senado considera “inadmisible” que “los responsables de delitos puedan obtener cualquier trato de favor guiado por intereses exclusivamente partidistas”; expresa su “absoluta desaprobación a cualquier negociación política encaminada a obtener el apoyo parlamentario a la investidura del presidente del Gobierno que incluya, como compensación, la concesión de una amnistía, expresa o velada, o cualquier forma de indulto o beneficio judicial, que en de una forma u otra busca favorecer a las personas procesadas por el proceso de secesión ilegal perpetrado en Cataluña”.

Rechaza también todas las modificaciones legales llevadas a cabo en la última legislatura para beneficiar a los responsables de la proceso, en referencia a la eliminación del delito de sedición y la reducción de las penas por malversación. Son dos decisiones que la Cámara Alta cree necesario revertir. En este sentido, propone actualizarlas para “castigar las formas más graves de deslealtad constitucional” entre las que se incluye la convocatoria de referendos o consultas no autorizadas o iniciativas que minen el crédito de España en la comunidad internacional.

El Senado también aboga por “recuperar la política de acuerdos de Estado entre las principales fuerzas a nivel nacional” para evitar “de forma inmediata que España se vea abocada a la disyuntiva entre un Gobierno débil y sujeto a la agenda del independentismo o la repetición de elecciones”. general”

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