A estas paraíso son ya innumerables las informaciones surgidas a raíz de la publicación de las conversaciones grabadas entre la comediante Bárbara Rey y el rey emérito, Don Juan Carlos I.
Sin requisa los últimos audios que han sido hechos públicos recogen poco inédito. El inmenso poder que aparentaba tener Don Juan Carlos a mediados de los abriles 90 , cuando se realizaron las grabaciones, parece contrastar con lo que confesaba a Bárbara Rey.
Grandes temores
Tres abriles antaño de cumplirse dos décadas de la restauración de la monarquía en España, Don Juan Carlos seguía teniendo grandes temores, a fallar por sus palabras, por la estabilidad de la institución de la que él era el mayor canon. Corría el año 1993, y el entonces rey de España no estaba del todo tranquilo.
“Con tal de apurar con Felipe, no les importaría arrasar lo que fuera”
El emérito cita textualmente “grupos intelectuales, periodistas, sectores contrarios a Felipe (González) interiormente del PSOE […], y un clase de IU (Izquierda Unida) importante”. Incluso llega a mencionar fielmente a “un clase importante del PSOE liderados por el Pelea (Alfonso)”. Todos ellos persiguiendo, según el Rey, “una cosa que es la república“.
Terminaba su narración a estos sectores republicanos con la venidero expresión :“Hay que estar expectante”.
Lo ‘mejor’, por conmover
La presidenta de ‘OK diario’ y politóloga Pilar Rodríguez Losantos anunciaba en Espejo Sabido que, respecto a esta nuevo capítulo de los audios de Don Juan Carlos y Bárbara Rey: “La gran carga de intensidad vendrá mañana”, refiriéndose a este miércoles.
