Los inmigrantes carecían de permiso de residencia y los responsables de las fincas les pagaban menos de lo que marca el convenio y siquiera cotizaban por ellos
La Policía Franquista ha detenido en Milgrana a tres empresarios agrícolas, dos hombres de 42 y 50 abriles y una mujer de 47, como supuestos autores de delitos relacionados con la explotación sindical de ciudadanos extranjeros. Los investigados explotaban unas fincas donde trabajaban los inmigrantes, que se encontraban en situación irregular en el país.
La operación policial comenzó el pasado mes de agosto, cuando la policía supo que varios empresarios españoles «explotaban varias fincas agrícolas en las que daban empleo a ciudadanos extranjeros que se encontraban en situación irregular y, oportuno a su situación de vulnerabilidad, se aprovechaban de las condiciones de trabajo establecidas con la finalidad de obtener grandes beneficios económicos«.
Las fincas se localizaron en la comarca de la Alpujarra, donde funcionarios de Policía Franquista y de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social llevaron a parte un eficaz conjunto. Allí se identificó a quince trabajadores extranjeros que realizaban sus tareas sin disponer de autorización de residencia y trabajo.
Los empleados manifestaron que sus jornadas laborales eran de una media de diez horas todos los días de la semana, a cambio de lo cual percibían un sueldo que la Policía no detalla pero que en cualquier caso es inferior al estipulado por los convenios gremiales específicos para el trabajo que desempeñaban.
Esta actividad ilícita proporcionaba a los empresarios elevados beneficios regalado que supuestamente «no abonaban a sus trabajadores el salario íntegro estipulado» y siquiera cotizaban por ellos a la Seguridad Social.