«Tiene usted en su mano no retornar a fallarnos una vez más». Este ha sido el mensaje que ha recibido el presidente del Gobierno de parte de 4.800 víctimas del terrorismo en una carta enviada en nombre de todas ellas por la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT). Maite Araluce, presidenta de la ordenamiento, firma esta misiva exigiendo la retirada inmediata de la reforma de la reforma de la Ley Orgánica 7/2014, de 12 de noviembre que fue aprobada en comisión parlamentaria por unanimidad y que, de entrar en vigor, propiciará la disminución del tiempo efectivo de cumplimiento en prisión de hasta cuarenta terroristas.
Han pasado cuatro días desde que el Gobierno culminó su plan para abatir las penas de una cuarentena de etarras que han cumplido condenas en cárceles francesas. Bajo la exposición de que se trataba meramente de la transposición de una norma europea, el Ejecutante ha acabado contentar a sus socios de investidura de EH Bildu reformando dicha ley. Una nueva cesión que previsiblemente se traducirá en apoyo parlamentario, poco que ya señala Araluce en la carta: «No cambie por un puñado de votos manchados de muerte a las víctimas del terrorismo».
Araluce ya mostró su rechazo a la medida negándole el saludo al ministro de Interior, Fernando Extenso-Marlaska, en una conferencia internacional, precisamente, de víctimas del terrorismo impulsada por la Naciones Unidas que se celebró esta misma semana en Vitoria. La presidenta de AVT llegó incluso a increparle según contó a torrevieja news today la propia Araluce, «deje ya de mentirnos», le espetó a Marlaska en aquel altercado. Ahora, dos días a posteriori hace lo propio con el presidente del Gobierno, pero el tono empleado es perfectamente desigual, de súplica.
Si perfectamente la propia Araluce admite que su relación con Sánchez «ha sido desde el principio muy complicada», la presidenta de AVT dirige esta carta al presidente del Gobierno para solicitarle que impida la reforma y las consecuencias que esta va a tener, sobre las que AVT ya avisó en el año 2022 pero que el ocupación de Interior «negó categóricamente». Finalmente, los peores temores de la asociación se han materializado dos primaveras más tarde, con víctimas horrorizadas frente a la perspectiva de que asesinos como Txapote salgan de prisión el año que viene.
«Las víctimas nos encontramos devastadas y con un sentimiento de indefensión», asegura Araluce, que relata en la misiva cómo desde el 7 de octubre, cuando se supo la anuncio, la centralita de la asociación está colapsada con llamadas de víctimas con «ataques de pánico y ansiedad». El sentimiento de indefensión se ha generalizado entre los más de 4.800 personas que configuran la AVT y que a través de la carta firmada por Araluce muestran su indignación, «el sentimiento generalizado es el de que están volviendo a matar a nuestros familiares. Como si los terroristas estuvieran celebrando la triunfo bailando sobre sus tumba», sentencia.
Pero no son solo las víctimas, asegura Araluce, las que han recibido esta anuncio con estupor y enojo, son asimismo los ciudadanos españoles de a pie que, aunque no hayan sufrido el terrorismo en primera persona, han querido contactar con AVT para trasladar su opinión sobre la disminución de penas a terroristas que se ha fraguado en el Congreso de los Diputados. «No se entiende», afirma el texto, «cómo el final del terrorismo de ETA lo están escribiendo los verdugos. Cómo matar va a salir prácticamente arbitrario en este país. Cómo la muerte derramada y todo el dolor que hemos padecido todos los españoles, y en exclusivo las víctimas del terrorismo, no ha servido para mínimo».