Cada dos abriles desde 1984 se celebra en Cornellà el Festival Internacional de Payasos, inicialmente en homenaje al catalán universal Charlie Rivel y que en las últimas ediciones inunda de risas, travesuras y coraje rojas las calles, plazas, teatros, escuelas, mercados y bibliotecas de esa ciudad del Baix Llobregat. En esta publicación del 40 aniversario, que se celebrará del 19 al 27 de octubre, están programados 70 espectáculos con la billete de 85 artistas y 47 compañías. Entre las actuaciones más esperadas, destacan las de tres payasos que participaron en la primera publicación y que ofrecerán lo mejor de su repertorio: el escocés Johnny Melville, el italiano Leo Bassi y el catalán Tortell Poltrona.
Este festival se ha convertido en uno de los más importantes del clase a escalera mundial y es una postura clara por impulsar la civilización y poner en valencia el mundo del payaso, que ya se ha convertido en un peculiaridad de identidad de la ciudad que lo acoge. En su día significó una firme postura de su concejo para poner en valencia a los entonces marginados del mundo del espectáculo y reivindicar su papel de artistas que crean civilización, irreverente, crítica, mordaz, absurda, pero civilización.
En 1984, el año de la distopía de Orwell que, «avant la lettre» anticipó un futuro en el que una dictadura totalitaria (redes sociales) interfiere hasta tal punto en la vida privada de los ciudadanos que resulta ficticio escapar a su control, el escritor y por entonces concejal de Civilización del Concejo de Cornellà, Ignasi Riera propuso desde Cornellà «un queja de refriega, una propuesta movilizadora: dejaros seducir por esta celebración del insensatez que el payaso oficia; dejaros padecer por el conjuro de una ciudad escaso pero dinámica, reconciliaros, en Cornellà y con los payasos y bajo el signo sugeridor y afligido de Charlie Rivel, con la imaginación».
Antonio Balmón, coetáneo corregidor de Cornellà, ha reivindicado este jueves el papel en la civilización metropolitana que juega su ciudad, «con una propuesta integradora, que invita a sonreír, y donde la mohín imprime títulos comunitarios». El corregidor ha subrayado que «el festival es ya un icono cultural a nivel internacional y cada publicación ha atraído a miles de personas a Cornellà, una ciudad correctamente comunicada con el resto de la metrópoli barcelonesa». Balmón ha añadido que su ciudad «lo pasa correctamente y demuestra que se pueden hacer cosas con voluntad de aportar y de sumar», para concluir que «esta semana haremos civilización, una forma de civilización que es imprescindible para afrontar el mundo coetáneo y dar respuestas constructivas y críticas».
La actriz y payasa catalana Pepa Plana recibirá en el festival el premio Hocico de Oro 2024 por su trayectoria, galardón que se le entregará durante la garbo inaugural del festival el jueves 24 de octubre. Es el alma y directora artística de la compañía que lleva su nombre, reconocida como referente doméstico en el clase por la calidad de sus espectáculos y por su contribución a la visualización de las payasas. Galardonada ya con numerosos premios, en esta ocasión igualmente quiere remarcarse su cuota e innovación en el verbo «clown».
Más de 25 espectáculos gratuitos de calle darán el pistoletazo de salida la mañana del domingo 20 de octubre en una fiesta inaugural frente a la plaza Francesc Macià con Més Tumàcat, Mundo Costrini y los talleres de Talleretcraft y Kanaya Circ. Pero el pesado de espectáculos gratuitos empezará la tarde del viernes 25 de octubre con un pasacalle por las calles de la ciudad y se alargarán durante todo el fin de semana con espectáculos de compañías como Plan Kavauri, Cía Eccentrici Dadarò o Cía Marta Renyer. Todas las entradas de los espectáculos de sala y de la carpa de la plaza de Cataluña ya están a la traspaso a través de la web del festival.