Las asociaciones de la guardia civil han vuelto a plantar cara a Fernando Grande-Marlaska. Todos los grupos del bloque han reclamado una reunión urgente para que el ministro del Interior les explique por qué, según denuncian, “descalifica la representación de los guardias civiles en los órganos de gobierno” del Instituto Armado.
el secretario general de jucil, Ernesto Vilario bien, considera prioritario celebrar una reunión de forma inmediata porque, según afirmó, “tenemos la impresión de que hay un plan para desprestigiar y desincentivar la labor de representación que la normativa otorga a las asociaciones para ser la voz de los guardias civiles elegidos por la vía democrática”.
De hecho, las asociaciones representativas de la Guardia Civil tomaron la semana pasada una medida sin precedentes al abandonar la reunión del Pleno de la Guardia Civil. Esta decisión se debió al continuo “menosprecio y desprecio” que sufre la Administración, “lo que demuestra un claro intento de desprestigiar, debilitar y debilitar nuestro trabajo”.
“Lamentablemente, la solicitud de reunión ha sido evitada tanto por el ministro como por su sustituto en la Presidencia del Consejo, el director general de la Guardia Civil. Además, ni siquiera el funcionamiento del Consejo, órgano cuyas decisiones carecen de los mínimos carácter vinculante, actualmente sirve como instrumento consultivo”.
La situación ha llegado a un punto en el que el Ministro del Interior sólo parece necesitar aplicar el Código Penal Militar para intentar silenciar a los 16 representantes de la guardia civil que actúan como miembros del Consejo de la Guardia Civil. Este hecho ha llevado a todas las asociaciones a levantarse contra este tipo de decisiones.
Vilario defiende en este sentido que “Jucil seguirá avanzando en la tarea de ser la voz de los guardias civiles ante la Administración pública, sin amenazas de recurrir al caduco y sin sentido Código de Justicia Militar pudiendo silenciar los deseos de mejora”. de miles de guardias.” civiles que anhelan desempeñar su tarea y que su trabajo sea reconocido y no discriminado en salario o empleo.
“Como ejemplo del trato desigual hacia los representantes de los guardias civiles y del Cuerpo en su conjunto, se han observado casos de reducción, eliminación y transferencia de competencias de los guardias civiles a otros cuerpos policiales.” “Evitamos entrar en una polémica de competencias con otros compañeros policiales, pero sí buscamos dejar muy claro cuál es la responsabilidad que corresponde a la Guardia Civil y qué futuro se plantea para este Cuerpo por parte de este o los próximos gobiernos”, ha señalado. dicho. aclaró el secretario general.