Ahora forma parte de una rutina establecida, un ritual de acoso e intimidación. Cualquier convocatoria en la que la entidad juvenil constitucionalista S’ha Finish! participa es boicoteado sistemáticamente por grupos independentistas. Amenazas de muerte y agresiones si no hay protección policial de por medio. La nueva ‘normalidad’ que iba a llegar a la Cataluña ‘post-procés’, la distensión tantas veces predicada, no llega definitivamente a los campus catalanes. “Es lo mismo de siempre, sistemático”, se lamenta en conversación con torrevieja news today el director de las Universidades de S’ha Finish!, Hugo Escarpa, en el tono de quien siente rabia y lucha por cambiar las cosas, pero que no puede ocultar una cierto sentimiento. de resignación.
El “business as usual” al que se refiere Escarpa se refiere al último episodio de intimidación contra la entidad, ocurrido el pasado martes en el campus de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), históricamente la universidad más permisiva con las acciones del independentismo. movimienot. . «Sí, en otros campus es diferente. En la UAB parece que todo va en nuestra contra«explica Escarpa, que reconoce que, al menos, la relación con los Mossos d’Esquadra es fluida: »Tenemos que avisarles que vamos a convocar un acto, y enseguida montan el cordón policial«. Vista así, es la nueva ‘normalidad’ catalana: furgonetas antidisturbios para poder montar una carpa y gritos de»Pum, pum, pum, que no me quedé ni una sola«(Pim, pam, pum, que no quede ni uno). Si la relación con la policía es buena, no se puede decir lo mismo de lo que ocurre con el rectorado, que nunca ha protegido a S’ha Finish! de los ataques recibidos. »Con el rectorado, nada«, resume Escarpa.
Lo visto este martes se refirió a escenas tantas veces sufridas por la entidad, que viene de cumplir cinco años como escindida de la plataforma juvenil de Sociedad Civil Catalana.
Como el resto de entidades, S’ha Finish! Tenía intención de participar el martes en la denominada La Comunitaria, una feria con la que los colectivos universitarios se dan a conocer al inicio de curso. Todo el mundo puede hacerlo, excepto ¡S’ha Finish!, perseguido brutalmente por una plataforma que se autodenomina “antifascista”, con especial presencia de miembros del Sindicat d’Estudiantes dels Païs Catalans, en la órbita de la CUP, así como a la juventud de ERC, y que alega que S’ha Finish! difunde “discurso de odio” para expulsarlos del campus, físicamente si es necesario. De hecho, dentro de poco más de dos meses se celebrará el juicio por un episodio anterior de agresiones de 2021 contra miembros de la entidad juvenil de la UAB.
Mencia Guerrero, integrante de S’ha Finish! También estuvo el martes en la Comunidad Autónoma. Mientras estuvieron resguardados detrás del cordón policial, no hubo problemas -es decir- pero cuando salió para ir a tomar algo, “uno de los manifestantes nos insultó y nos arrojó una botella de agua«. »Sí, normal«, explica a este periódico.
¡Registrado en S’ha Finish! desde 2021 asume que la suya fue una decisión contracorriente, nada que ver con el dejar ir que prevalece entre una mayoría en el campus de la UAB, donde los antifascistas que practican el fascismo dictan quién puede o no existir. «Piden libertad de expresión, y no nos dejan expresarnos. “Así son las cosas”, explica. Nueva ‘normalidad’ catalana.