El Hospital de Enfermería Isabel Zendal puede ser el que más titulares ha acaparado en los últimos años. Por su excepcionalidad como único centro especializado en emergencias; por haber sido construida en tiempo récord y por su coste; por las polémicas que lo han acompañado desde su nacimiento, incluidos sabotajes; por las críticas a su utilidad escuchadas por parte de muchos partidos de oposición; por si tuviera un uso adecuado o fuera un ‘elefante blanco’… Ayer se supo que el centro, que atendió a 10.000 personas durante la pandemia, se vuelve a reinventar, y sus responsables anuncian ahora que se va a convertir en un Centro de Neurorrehabilitación de referencia, que estará dotado de quirófanos para dar un respiro a las listas de espera, y que además contará con una unidad de diagnóstico con todos los avances técnicos.
Para hacerse cargo de estas nuevas funcionalidades habrá que realizar una inversión en infraestructuras que el Ministro de Sanidad, Fátima Matute, estimado en unos 50 millones de euros. Además, en esta nueva etapa contará con plantilla fija, a diferencia de lo que ocurrió durante la pandemia, cuando se trasladaron temporalmente profesionales sanitarios de otros hospitales al Zendal, en un número ajustado al flujo de pacientes en cada momento. Ahora, la previsión del consejero es que se gastarán unos 100 millones de euros al año en recursos humanos.
La presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, se trasladó ayer desde el pleno de la Asamblea para anunciar cómo será la “nueva vida” de uno de sus proyectos más personales: el hospital de urgencias. Un centro único en Europa, y que tras el fin de la crisis del Covid, había quedado un poco desdibujado y sin una finalidad clara. Los responsables de Sanidad quieren dárselo ahora reconvirtiéndolo en un Centro de Neurorrehabilitación, donde se tratarán pacientes que hayan sufrido daños neuronales o medulares recuperables.
“La calidad de vida de los pacientes que han sufrido lesiones medulares y cerebrales es una prioridad para nosotros”, afirmó Díaz Ayuso. Estas actividades se desarrollarán en el Pabellón 1 del hospital, y atenderán a pacientes de todas las edades, tanto niños, jóvenes como adultos.
Entre ellos, pueden haber menores que hayan sufrido un traumatismo craneoencefálico con graves consecuencias, o adultos afectados con lesiones medulares a consecuencia de un accidente de tráfico, o que sufran lesiones cerebrales que mermen su capacidad física e intelectual.
Autonomía
El objetivo es que, a través de estos tratamientos, “logren el mayor grado de autonomía, recuperen la autoestima y puedan volver a su vida diaria con la mayor normalidad posible”, explican en Sanidad.
Aquí también se ubicará la guardería para pacientes con esclerosis lateral amiotrófica (ELA), como se anunció hace apenas unas semanas. Esta, de hecho, será la primera de las nuevas funcionalidades que se lanzarán: en el primer trimestre de 2024. Por lo demás, habrá que esperar un poco más: hasta finales de 2025, según las cuentas de la Ministra de Salud, Fátima Matute.
Ambos tipos de patologías estarán distribuidos en un mismo pabellón, pero tendrán circuitos independientes. Los tratamientos incluirán innovaciones como espacios equipados con realidad aumentada, salas inmersivas de realidad virtual, exoesqueletos y rehabilitación robótica, entre otros.
pacientes
con Covid-19 recibieron tratamiento en el Hospital Zendal; En algunos momentos, el 50 por ciento del número total de infectados fueron ingresados. Actualmente hay unos 70 ingresados en la unidad de rehabilitación por casos permanentes de Covid
Además de tratar a estos pacientes y buscar su mejora, la especialización del centro en este campo también le permitirá avanzar en la investigación, la publicación y la docencia. Así pasó, recuerdan los responsables del centro, con la pandemia, que les convirtió en grandes especialistas a nivel internacional: su unidad de cuidados respiratorios intermedios, por ejemplo, atendió a 1.700 pacientes, y fue la más grande de Europa. El Centro contará con una Unidad de Neurorrehabilitación Intensiva y otra unidad de pediatría, además de fisioterapia, logopedia, terapia ocupacional, psicólogos y recuperación neurocognitiva.
En su diseño se tendrán en cuenta factores que contribuyen a la calidad de la atención: instalaciones amigables, estructuras panelables y modificables, áreas con luz y vegetación, arquitectura sanitaria colorida y espacios que ayuden a la recuperación del paciente. Y también atenderá al bienestar y equilibrio de las familias de los pacientes.
En el caso de los niños, se velará por que el tratamiento sea ambulatorio y en horarios compatibles con las actividades escolares. Allí llegarán pacientes remitidos desde los hospitales donde se trata su problema médico.
En cuanto al centro de día ELA, quedará integrado en la futura RED ELA, que constituye las cinco unidades hospitalarias de la región distribuidas entre los centros 12 de Octubre, Clínico San Carlos, La Paz, Infanta Elena y Rey Juan Carlos, así como así como también la futura Residencia Puerta Hierro, que se convertirá en la primera del mundo de estas características para pacientes afectados por esta patología.
Millones de euros
al año que tendrá que invertir el Zendal cuando funcione como centro de neurorrehabilitación, unidad quirúrgica y de diagnóstico y con las nuevas UCI.
Pero el Zendal sumará otras funciones a estas: también contará, en sus pabellones 2 y 3, con una serie de unidades de cuidados intensivos, unidades de recuperación y un nuevo centro quirúrgico de alta resolución, con entre 10 y 15 quirófanos. En ellos se realizarán intervenciones de forma ambulatoria a los pacientes que se encuentren en lista de espera.
En esta misma zona del Zendal también se instalará el Centro de Diagnóstico de alta resolución, que contará con espacios adecuados y equipos de última generación para realizar pruebas de laboratorio, radiografías, ecografías, tomografía computarizada (TC) exploraciones y resonancia magnética abierta.
Este será un espacio que dará apoyo al resto de hospitales del Servicio Madrileño de Salud, donde también hay largas listas de espera para la realización de todo tipo de pruebas diagnósticas.
Listo en 24 horas
Pero el Hospital de Urgencias no olvida su carácter inicial, aquel con el que nació: actuar ante una situación o crisis sanitaria imprevista y repentina. En este sentido, la presidenta Díaz Ayuso ha recordado que el centro sigue manteniendo su polivalencia, y su capacidad de reacción ante una necesidad. De hecho, aseguró, podría atender a pacientes afectados por una catástrofe de forma inmediata y en menos de 24 horas.
La historia del Hospital de Enfermería Isabel Zendal comenzó en el verano de 2020, cuando la presidenta Díaz Ayuso anunció su construcción como el primer centro de atención de urgencias. Apenas cien días después del anuncio, en diciembre, abrió, y el 11 de ese mes llegó el primer paciente, de Gregorio Marañón. Le siguieron muchos más, hasta 10.000 personas ingresadas, una cifra que lo ha convertido en el hospital europeo con más pacientes Covid atendidos.
También fue utilizado en el programa de macrovacunación contra la pandemia: más de 2,2 millones de personas pasaron por sus instalaciones y allí fueron inmunizadas.
En su interior también se encuentra el Laboratorio Regional de Salud Pública. Y allí también fueron atendidos los refugiados ucranianos que llegaron a Madrid, así como los heridos de aquella guerra que necesitaban tratamiento rehabilitador.