amanecen tres coches calcinados tras la ola de vandalismo


No vive Usera sus mejores semanas. Sus vecinos se hallan desconcertados con los acontecimientos que están presenciando en este mes de octubre. Sobre todo los que habitan en las inmediaciones de la calle Cerecinos. Hace casi nada dos semanas, decenas de vehículos estacionados en esta pequeña vía amanecieron vandalizados con pintura blanca y con las lunas hechas pedazos. Y anteayer, los mismos residentes asistieron al óbito de otros tres turismos que fueron calcinados de alboreo.

Ocurrió a las cuatro de la mañana. Una musculoso golpe sorprendió a varios agentes de la comisaría de Policía Municipal del distrito. Se desplazaron, de guisa inmediata, hasta Cerecinos, donde contemplaron cómo tres vehículos ardían sin control. Bomberos del parque botellín, el situado en el Paseo de Santa María de la Individuo, en Usera, fueron los encargados de sofocar el incendio.

Cuando los agentes llegaron al ocupación de los hechos no divisaron a nadie. Pero varios vecinos fueron testigos de cómo una persona «con chaqueta negra» huía tras prender fuego a los vehículos. La descripción de su vestimenta fue recogida tanto por la Policía Municipal como por la Policía Franquista, encargados de la investigación y de colocar al autor del suceso, aún sin identificar.

Según indica una portavoz de la Policía Municipal a este diario, se cree que los turismos quemados no guardan relación alguna con los que amanecieron vandalizados con pintura hace tan sólo unas semanas. Con respecto a estos últimos actos vandálicos, y según pudo coger este folleto en aquel entonces, los residentes -que hacían hincapié en que eran «los olvidados de Madrid»– desconocen quién puede estar detrás de ellos. Y si obran en comunidad o se manejo de una única persona. «¿Los motivos? ¡A enterarse!». Aunque, por el ‘modus operandi’, tienden a creer que se manejo más de una «niñatada».

La vicealcaldesa de Madrid y portavoz del Gobierno municipal, Inma Sanz, indicó ayer que el consistorio está trabajando de guisa muy intensa y coordinada con la Policía Franquista con el propósito de obtener resultados «lo antiguamente posible»: «Llevamos varias semanas en un dispositivo conjunto con la Policía, con muchos agentes de paisano, con coches camuflados».

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