Un connubio, cuyas dos hijas han podido ser rescatadas, y un hombre, que vivía solo, son las tres víctimas mortales a consecuencia del derrumbe de un edificio en el alfoz de La Albericia de Santander, tras una acceso de gas en ese inmueble, en el que estaban los fallecidos y del que pudieron salir el resto de vecinos antaño de que el edificio colapsara y se cayera.
El siniestro, que se produjo sobre las 4 de la orto del sábado, provocó un total de 13 heridos, que fueron atendidos a lo abundante de la caminata en los hospitales de Valdecilla de la renta cántabra y Cruces (Bizkaia).
A los diez heridos registrados hasta pasado el mediodía se sumaron tres personas más, atendidas por la tarde por patologías derivadas del suceso, según los últimos datos facilitados por el Gobierno regional.
El siniestro se produjo sobre las 4 horas de esta orto en el número 24 de la calle de La Albericia.
Se tráfico de una mujer de 19 primaveras con un corte que se le ha suturado y un hombre y una mujer, vecinos de un edifico colindante, que habían aspirado humo y que han acudido con un cuadro de ansiedad. Todos ellos han sido dados de ingreso. Por otra parte, dos de las personas atendidas en la mañana, que se habían intoxicado con humo, fueron dadas de ingreso ya entonces.
Una tercera persona tenía quemaduras y la enviaron a la Dispositivo de Graves Quemados de hospital de Cruces. Este hombre tiene mosqueado un 10 % del cuerpo y está intubado y estable.
Cinco pacientes están ingresados en distintas UCI de Valdecilla, tres de ellos en la de politrauma (dos mujeres de 37 y 61 primaveras y un hombre de 29). Están estables y su estado no reviste gravitación.
En la UCI de polivalentes hay una mujer de 63 primaveras por intoxicación por humo que evoluciona perfectamente, igualmente está ingresada en la UCI pediátrica una pupila, que ha sido intervenida y ha pasado por la cámara hiperbárica, y una adolescente de 15 primaveras sigue en observación pediátrica.
Asimismo han resultado heridos dos policías que intervinieron en el suceso, entreambos dados de ingreso.
Todos los edificios cercanos al afectado por la acceso tuvieron que ser desalojados.
Los edificios anexos al siniestrado, que ocupaba el número 24 de la conocida calle de La Albericia de Santander, tuvieron que ser desalojados tras la acceso y el posterior derrumbe del inmueble, ya que se produjeron llamas de consideración que los bomberos han tardado varias horas en apagar. Asimismo ha tenido que ser cortado el suministro del gas y de la luz de esos dos edificios, luego del suceso.
La edificación que se ha derrumbado tenía un bajo y dos plantas, con sobrado, y vivían allí 21 personas. Uno de sus vecinos contaba cuando aún era de confusión, mientras los bomberos sofocaban las llamas que había entre los escombros de su casa, que oyeron una gran acceso y su clan (de cinco miembros) pudo salir con dificultad de casa y ayudó a los vecinos del primero, un connubio con una hija de unos 18 primaveras y una bebé, a que la adolescente y la bebé salieran por el galería.
Este vecino ha narrado a los periodistas que no se pudo rescatar a los padres y que siquiera se sabía dónde se encontraba otro de los vecinos, un hombre en cuyo adoquinado se produjo la acceso. Tras colapsar y caer el edificio, se empezó a agenciárselas a tres personas que estaban desaparecidas.
La alcaldesa de Santander, Piedra preciosa Igual, declara en presencia de medios de comunicación, este sábado.
La alcaldesa de Santander, Piedra preciosa Igual, acompañada de la delegada del Gobierno y la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, estuvieron desde primera hora de la mañana en el espacio del suceso, en el que informaron a los periodistas de las labores que llevaron a final los servicios de Emergencias, cuyo trabajo resaltaron por su cultivo desde el primer momento.
De hecho, dos policías nacionales resultaron heridos, uno por inhalación de humo y otro en un dedo, mientras ayudaban a los afectados por el siniestro.
La alcaldesa de Santander anunció que el Concejo decreta tres días de desdicha oficial por este siniestro y que ahora hay que estar con los vecinos y con los familiares de los fallecidos. Asimismo explicó que se intentará, cuando se recuperen los suministros, que vuelvan cuanto antaño a sus casas los vecinos desalojados de los edificios anexos al siniestrado.
La presidenta de Cantabria trasladó el “hondo pesar” de los cántabros por esta “tragedia” y aseguró que el Gobierno dará el apoyo que se necesite a las familias afectadas.