Sumar reunirá este lunes al agrupación parlamentario en el Congreso, una cita que asistirá la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y que llega en plena crisis por las denuncias de acoso sexual contra su exportavoz, Íñigo Errejón.
Diversas fuentes de la coalición que forma el socio minoritario del Gobierno admiten que la situación que atraviesan es extremadamente difícil y que el plan, que encaraba durante estos meses una escalón de rearme por los malos resultados del ciclo electoral de este año, queda tocado.
Encima, el PP y Vox han agresivo duras críticas a Sumar con acusaciones a la vicepresidenta segunda de tapar las denuncias contra el exdiputado e incluso han emplazado a la confluencia a disolverse. Por su parte, desde el PSOE han defendido la proceder de su socio en el Gobierno y el propio presidente, Pedro Sánchez, trasladó su confianza en Díaz y en Sumar.
Díaz regresa tras su alucinación a Colombia
En este contexto, Díaz regresa a España tras concluir un alucinación oficial en Colombia durante las primeros días de la crisis, legado que el jueves Errejón presentó su dimisión y abandonó la política en una semana donde transcendieron acusaciones de acoso y violencia sexual contra él, incluida la de la actriz Elisa Mouliaá.
Desde Sumar han remarcado que fue la además titular de Trabajo quien desde el miércoles conversó con Errejón, pidiéndole explicaciones por esta denuncia e instándole luego, tras examinar los hechos, a dimitir.
Sumar admitió fallos de protocolo
La formación compareció el sábado para pedir disculpas a la ciudadanía, contraer que sus protocolos contra la violencia sexual habían fallado y examinar que los género del caso Errejón eran «devastadores» para Sumar.
Eso sí, desde la dirección declinaron susurrar de dimisiones y avanzaron el despliegue de un plan contra la violencia machista, aceptado en marzo en su asamblea pero cuyo despliegue se ralentizó por el ciclo electoral y otras razones organizativas, y la obligada formación en esta materia de todos sus cargos.
Encima, el portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, remarcó que si hubieran conocido antiguamente las informaciones sobre Errejón que surgieron durante esta semana, habría sido cesado mucho antiguamente.
Por su parte, Más Madrid cesó a la ya exdiputada Loreto Arenillas por su papel en la delación contra Errejón de una mujer que asistió a un festival musical que se celebraba en Castellón, al alegar que las explicaciones que dio en su día no se ajustaban a la efectividad de los hechos. Por su parte, la exdiputada entregó su certificación en la Asamblea de Madrid, anunció que abandonaba el partido y aseguraba que la portavoz de Más Madrid, Manuela Bergerot, conocía el caso en 2023.
Tendá que designar nuevo portavoz
En este clima abre la semana el socio minoritario del Ejecutante que el lunes congregará a sus diputados en una reunión de agrupación, ahora descabezado tras la marcha de Errejón aunque con la certeza de que su escaño vacante será ocupado por la dirigente de Más Madrid Alda Recas.
Así, Sumar tendrá por tercera vez en esta asamblea que designar a su principal referente en el Congreso, legado que Errejón ya suplió a Marta Lois cuando renunció al cargo y el certificación de diputada para ser candidata en las últimas elecciones gallegas.
Sobre esta cuestión, IU ya ha demandado que se haga coparticipe de esta valentía a todas las fuerzas de la confluencia, legado que en virtud del acuerdo de coalición la potestad de designar al portavoz recae en ‘Movimiento Sumar’, y reclamó una «catarsis» y «cirugía radical» para reorganizar el plan, admitiendo que el caso Errejón ha franco a la «izquierda en canal». Y apostaba por designar una mujer como nueva portavoz.
Al respecto, diversas fuentes del agrupación parlamentario ven necesario designar cuanto antiguamente al reemplazo de Errejón y creen que los perfiles con más opciones son el de la coetáneo portavoz adjunta, Aina Vidal, que ya sonó en las quinielas para el puesto, o la diputada Verónica Rapabarbas.
Crisis de confianza
Mientras, el caso Errejón ha reabierto tensiones en Sumar, legado que a las demandas de reorganización del espacio a la izquierda del PSOE que demanda IU hay diputados que admiten que, por un flanco, han perdido credibilidad delante su electorado en un tema haber como el feminismo y, a su vez, la confianza entre las organizaciones que componen la coalición queda erosionada.
Todo ello cuando, bajo su criterio, estaban marcando las grandes cuestiones de la dietario política pese a que en términos demoscópicos la marca estaba por encima del 6% de intención de voto (muy por debajo de lo obtenido en 23J) y el agrupación se estaba engrasando mejor tras la ruptura con Podemos, la marcha de su primera portavoz y un año impresionado por cuatro citas electorales.
Ahora, la coalición pierde a uno de sus principales activos políticos en un caso que les ha dejado en «shock» y con gran daño reputacional entre las bases de izquierda.
Así, ha remarcado que aunque hay muchos partidarios de un frente amplio de organizaciones, Sumar como plan para llevarlo a lengua queda herido y alertan de que la derecha va a seguir atacando por el lado que abre las denuncias de violencia machista contra Errejón.
«Nos va a costar empuñar la individuo, nos van a dar hasta el carnet de identidad», resumía un diputado estos días un diputado.
Por otro flanco y en las redes sociales, el diputado Jorge Pueyo expresó que Sumar no compartió ninguna información sobre la papeleo del caso de Errejón y que la información le pilló en una entrevista. Otro parlamentario considera que fue Más Madrid quien presionó para su renuncia, legado que el lunes ya estaba actuando delante las informaciones sobre Errejón y que, tras consentir los hechos, demandaron a Sumar que le pidiera el certificación.