Este intenso calor estuvo acompañado de olas de calor más intensas, prolongado y frecuente, estableciendo récords sin precedentes. Además, en el noreste peninsular, 2022 ha sido catalogado como el año más seco en casi tres siglos, siendo en concreto 279 años.
Ernesto Tejedor, uno de los principales autores de este revelador estudio y destacado investigador del MNCN, comentó: “Lo que vivimos en 2022 no fue un verano cualquiera. Las olas de calor se han vuelto más recurrentes en las últimas dos décadas, pero este año fue sin duda excepcional”. . Tejedor atribuye estas condiciones extremas a la masas de aire caliente procedentes de África que se trasladaron a la Península Ibérica con inusitada persistencia.
Para arrojar luz sobre este fenómeno, el equipo comparó los datos de temperatura y precipitación del año pasado con registros históricos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), algunos de los cuales se remontan a 130 años. Tejedor explicó: “En nuestras observaciones identificamos un aumento de 3,3ºC en la temperatura superficial del mar. Además, las olas de calor se prolongaron durante 4 días más y observamos temperaturas más altas en zonas urbanas y rurales”.
Como si eso fuera poco, los científicos del clima también compararon los datos actuales con reconstrucciones climáticas Residencia en tres anillos del noreste de España, corroborando el carácter excepcional del verano 2022.
“Estos veranos extremos podrían convertirse en una nueva normalidad”
Europa ya ha sentido antes el golpe de las altas temperaturas, como en el verano de 2003, que dejaron cientos de muertes. Los investigadores, conscientes de esta vulnerabilidad, instan a tomar medidas de precaución. “Si bien 2022 puede verse como una anomalía, los patrones climáticos actuales sugieren que estos veranos extremos podrían convertirse en una nueva normalidad. Es esencial implementar políticas y estrategias para contrarrestar los efectos del cambio climático, centrándose en las zonas urbanas, donde se encuentran las poblaciones más vulnerables. en mayor riesgo”, advirtió Tejedor.
Esta alerta, basada en el estudio ‘Calor sin precedentes: Una mirada al verano excepcional de España de 2022’, pone de relieve la necesidad imprescindible de reconocer y adaptarse a los retos del cambio climático en un mundo que continúa transformándose.