«Es otra manera de cabrear a la gente»


El expresidente del Senado considera que no es aceptable “perdonar un delito cuando dicen que lo volverían a hacer”

El expresidente del Senado, Juan José Laborda ical

El expresidente del Senado Juan José Laborda afirmó este lunes en Burgos que Ve “fatal” una posible ley de amnistía porque la considera una “forma de cabrear a la gente”. Sumándose a otras voces críticas con el socialismo, el protagonista de los primeros años de democracia, actual miembro del Consejo de Estado y senador hasta 2004, ha señalado que “dejando de lado los aspectos legales, que son muchos y muy claros, La gente no acepta que se pueda perdonar un delito cuando luego dicen que lo volverían a cometer».

Durante la inauguración del seminario del primer semestre de la Cátedra de Monarquía Parlamentaria de la Universidad de Burgos (UBU), al que él mismo ya dirige las preguntas de los medios sobre si una ley de amnistía encajaría en la Constitución española, ha señalado que “a estas alturas es un científico” y No quiso emitir “juicios” porque no sabe qué va a pasarinformes ical

Durante su intervención, y marcando distancias con la situación actual, ha recordado que cuando durante la Transición se llegó al acuerdo de que habría “Cortes constituyentes” fue cuando “Se aprobó la Ley de Amnistía, que coincidió con la aprobación de los Pactos de la Moncloa», dijo, al tiempo que señaló que entonces hicimos «un punto y un alejamiento del pasado y nos reconciliamos todos». Eso fue la amnistía y eso no es lo que está pasando ahora”, afirmó.

El director de la Cátedra de Monarquía Parlamentaria también ha asegurado que el La Constitución de 1978 acertó en su origen porque consiguió transformar España de un país atrasado a uno de los veinte países más democráticos del mundo y ha afirmado que en este sentido cabe preguntarse “hasta qué punto la condición de Monarquía Parlamentaria es una coincidencia o una causalidad”. En este sentido, Laborda ha concluido que es el motivo por el que España ha conseguido “pasar de ser un país política y socialmente atrasado a ser uno de los países más democráticos del mundo y donde más se respetan los Derechos Humanos”.


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