El termómetro marcaba 31 grados y el cielo estaba despejado en Zaragoza este 17 de agosto, durante el ingreso de la Princesa Leonor a la Academia General Militar. Tras el primer acceso, cuatro soldados esperaban atentos la señal que anunciaba la llegada de la Familia Real. El silencio se rompía de vez en cuando por transmisiones de walkie-talkies.
Con el sonido de las campanas que marcan el mediodía llegó la Princesa Leonor, acompañada del Rey Felipe VI, la Reina Letizia y la Infanta Sofía. Se apearon del coche frente al edificio histórico de ‘la General’. “Estoy deseando que llegue”afirmó la hija mayor de los Reyes. ¿Nervios? “Un poco”, respondió. “Hay que tener un poco de nervios”, reafirmó don Felipe.
Luego de ingresar al edificio dieron un breve paseo por la Avenida del Ejército. Entre risas, la reina Letizia charlaba con su hija, que hoy comienza su formación militar en la Academia. Se detuvieron a medio camino bajo la sombra de un árbol y Leonor salió a buscar su petate, que arrastró hasta el momento de su despedida.
«Os damos todo nuestro ánimo para que los primeros días, que serán duros, se superen con paciencia y esfuerzo”, afirmó don Felipe. Leonor abrazó a sus padres y su hermana, la Reina, visiblemente emocionada, se despidió de la Princesa mientras ésta se dirigía al proceso de filiación.
Los Reyes, tras asistir desde lejos a la entrada de la Heredera, se dirigieron a la calle Alhucemas, para saludar con aplausos a los familiares del resto de cadetes que han entrado hoy. “Guardo muy buenos recuerdos de cuando entré”, declaró Felipe VI antes de emprender el camino de regreso a Madrid.