Metro de Madrid reabre este sábado el tramo de la Línea 1 entre las estaciones de Nueva Numancia y Valdecarros, por lo que toda la línea azul de Cercanías estará en funcionamiento, aunque los trenes no pararán en Atocha Renfe debido a las obras de ampliación de la Línea 11.
De esta forma, se recupera la circulación de trenes en este tramo de diez estaciones de la Línea 1 después de que el pasado 27 de septiembre se inaugurara la conexión entre Sol y Nueva Numancia, ambos tramos afectados desde el 24 de junio por obras de mantenimiento. mejora y renovación de la que es la línea de cercanías más antigua de Madrid.
En concreto, este sábado se restablecerá el servicio en las estaciones de Portazgo, Buenos Aires, Alto del Arenal, Miguel Hernández, Sierra de Guadalupe (con conexión a Cercanías-Renfe), Villa de Vallecas, Congosto, La Gavia, Las Suertes y Valdecarros. .
Durante el tiempo que han durado las obras de renovación y mejora de esta segunda fase, la Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT) ha habilitado un servicio gratuito con hasta 58 autobuses que discurren desde el final de la línea hasta Atocha.
Con esta reapertura, la Línea 1 de Metro (Pinar de Chamartín-Valdecarros) recuperará casi la totalidad del servicio tres meses después, con la única excepción de la parada de Atocha Renfe, donde los trenes no pararán debido a las obras de ampliación de la línea. Línea 11.
La línea más antigua de la red.
Las obras han afectado a 13 kilómetros de un recorrido de más de 23,3 de la línea más antigua de la red metropolitana, en funcionamiento desde 1919, la segunda más utilizada por los madrileños, con 82 millones de viajes en 2022.
Paralelamente se han actuado en las instalaciones de la aerolínea y en el sistema de señalización y se han realizado trabajos de desamiantado, todo ello reduciendo los tiempos de viaje de los trenes, introduciendo mayores prestaciones tecnológicas que aumentan la fiabilidad de las instalaciones y optimizando los costes de obra y mantenimiento. del camino.
Entre otros, se han eliminado el lastre (piedras que se colocan sobre la plataforma de vía) y las traviesas de madera para sustituirlas por una nueva plataforma de hormigón, renovando así los sistemas de sujeción y soporte de los carriles. e incorporar nuevos dispositivos de alta tecnología que gestionen los cruces y bifurcaciones de las vías. Con ello se busca reducir ruidos y vibraciones y mejorar el sistema de drenaje, lo que optimizará su conservación y reducirá incidencias.
En sus más de cien años de historia se han llevado a cabo numerosas obras de mejora e innovación en la Línea 1 de Metro, destacando la ampliación de andenes en los años 60 o la reciente consolidación del túnel en 2016. En un guiño a la historia de La La compañía ha instalado recientemente en uno de los accesos a la estación de Menéndez Pelayo un tótem rectangular de 4,5 metros de altura con el emblemático rombo que es imagen de la compañía, similar al de Cuatro Caminos, que recrea la columna que se colocó el siglo pasado para marcar los accesos al suburbano a gran distancia.