«La foto de la vergüenza.». Así ha calificado el Partido Popular la imagen de Pedro Sánchez reunión en el Congreso con representantes de Bildu. Un encuentro que los populares no creían que pudiera tener lugar y que confirma que “Sánchez está dispuesto a todo para seguir en el poder”.
Cuca Gamarra, portavoz popular en el Congreso, habló este viernes de un “puente negro” y de uno “de esos días que los demócratas nunca pensaron que podrían vivir”. Se refería al encuentro entre Pedro Sánchez y Mertxe Aizpurua, portavoz parlamentaria de Bildu. «Un partido que hace apenas unos meses tenía en sus listas candidatos con crímenes de sangre. Un partido que todavía no condena el terrorismo y que se niega a colaborar para esclarecer los crímenes de ETA. Aizpurua es lel mismo que celebró los asesinatos de los compañeros de quienes hoy se reunieron con ella y le sonrieron. “Todo es posible si hablamos de Sánchez”, afirmó Gamarra, entre contundencia e incredulidad.
Porque para el PP la línea roja cruzada este viernes por el PSOE es definitiva. “Todo para permanecer en el poder”. «Es un blanqueo indecente a Bildu. Los terroristas que condenaron conjuntamente todos los partidos constitucionalistas son los que hoy están legitimados y facultados para decidir quién es el próximo presidente del Gobierno de España.
Gamarra se quejó de los límites que estaba traspasando el candidato, quien “Anteayer estuve hablando con un hombre condenado por sedición.que hoy lo hace con un partido que no condena el terrorismo y que dentro de unos días lo hará con un prófugo de la justicia”, en referencia al posible encuentro entre el actual presidente en funciones y Carles Puigdemont.
El PP exigió a Sánchez saber si había pedido a Bildu que condenara el terrorismo o que dejara de promover homenajes a etarras antes de recibir sus votos. «Es un absoluto ejercicio de indignidad que España no merece. Nunca un líder ha bajado tanto para mantenerse en el poder”, afirmó.