El operativo de rescate ha conseguido extraer el cuerpo sin vida del espeleólogo francés que falleció ayer jueves tras quedar atrapado en una cueva en exploración en el municipio cántabro de Soba, en la zona del Portillo de La Sía, sobre las cuatro de la madrugada. por un desprendimiento de rocas.
Desde entonces, miembros del Grupo de Salvamento en Montaña de Potes (GREIM) custodian el cuerpo a la espera de que un helicóptero del Gobierno de Cantabria lo lleve al aeropuerto, donde ya ha aterrizado para ser detenido por la Guardia Civil.
Fotografía de los miembros del equipo de rescate para localizar al espeleólogo francés
“Maniobra compleja”
Según ha informado el Gobierno regional, se ha tenido que realizar una “compleja maniobra” de salvamento que ha incluido pequeñas voladuras para permitir el paso y trasladar el cuerpo en camilla hasta la salida. Además, ha detallado que el aparato ha tenido que sortear pasajes “muy estrechos” y dos pozos de 25 y 7 metros de altura con contrapesos.
El helicóptero del Gobierno ha acudido esta mañana al lugar y los equipos de rescate han trasladado el cadáver hasta las inmediaciones de la aeronave, donde lo han subido a bordo con la grúa. A continuación, se ha emprendido el vuelo de regreso al aeropuerto, donde el cadáver ha sido recibido por los servicios funerarios.
Imagen facilitada del espeleólogo francés fallecido este jueves en el interior de una cavidad en Soba (Cantabria)
Con ello se da por concluida la operación de rescate de este espeleólogo que, según el Gobierno, al igual que sus dos compañeros -que han resultado ilesos- era un experimentado profesional que había cartografiado en numerosas ocasiones diversas cuevas de Cantabria.
El Ejecutivo cántabro activó ayer un dispositivo de más de 30 personas para rescatar a la víctima. Parte del operativo finalmente logró llegar hasta él y confirmaron su muerte.
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El cuerpo se encontraba en una zona bastante inestable debido al desprendimiento de rocas que provocó el fatal desenlace. Las dos personas que acompañaban al fallecido, también de nacionalidad francesa, fueron las que avisaron a los servicios de emergencia después de que se desprendiera parte del techo de la cueva.
Según la información que ha trascendido, se trata de una cavidad compleja y muy estrecha, con dos pozos de 25 y 7 metros, meandros muy estrechos que probablemente tendrían que ser removidos con microblasting, y una sala circular de 1,5 metros donde se golpeó. por el techo.
dispositivo de busqueda
En el dispositivo de búsqueda han participado técnicos de la Dirección General del Interior del Gobierno de Cantabria, espeleólogos de Cruz Roja, GREIM de la Guardia Civil de Potes, Guardia Civil y voluntarios del Grupo de Protección Civil de Ramales de la Victoria.
Un primer equipo de evaluación, formado por miembros del GREIM, espeleólogos de Cruz Roja y el coordinador de la Dirección General del Interior, acudió inicialmente a la cueva con el objetivo de evaluar e informar sobre la situación. Estas tropas son las que alcanzaron la fatalidad.
área marcada
Mientras tanto, otros miembros de la operación procedieron a señalizar la zona para evitar pérdidas y colocaron un transmisor en la boca de la cueva para garantizar las comunicaciones con el Puesto de Mando Avanzado, ubicado en el polideportivo La Gándara de Soba.
El Gobierno regional ha agradecido “la profesionalidad y el esfuerzo” de todos los integrantes de la operación, que han resuelto con éxito “un rescate extremadamente complejo”.