En el caos vial que se presenta en las principales vías de nuestro país, la discusiones al volante son su pan de cada día. Él estrésel correr y el frustración A menudo resultan en acalorados intercambios verbales entre conductores. Sin embargo, más allá de meras expresiones de desacuerdo, estos enfrentamientos pueden convertirse en episodios que rozan la tragedia. En un abrir y cerrar de ojos, una discusión aparentemente trivial al volante puede desencadenar acontecimientos que ponen en peligro la vida de los implicados, transformando las carreteras en escenarios donde La furia al volante puede tener un coste mortal.. En ese sentido, en un impactante hecho ocurrido este sábado en Poio, un joven de veinte años resultó gravemente herido tras ser atropellado intencionalmente por un taxista Municipio. Según desvela La Voz de Galicia a partir de un comunicado de la Policía Local del municipio, el hecho se produjo poco después de las dos de la tarde en la calle Baliña, en la zona de A Caeira.
Una discusión que terminó en un incidente grave
La disputa comenzó cuando el joven, con su vehículo mal aparcado delante de un vado, impidió el acceso a un garaje al que quería acceder el taxista, provocando un acalorada discusión con el taxista. Testigos presenciales informaron que la discusión escaló a tal punto que el taxista terminó atacando al joven y arrastrándolo varios metros sobre el capó hasta chocó con otro auto estacionado en la zona. Como consecuencia del impacto, el joven sufrió varios lesiones gravesentre los cuales se encuentra un posible pelvis rota.
Mientras varios testigos, atónitos por lo sucedido, intentaban ayudar al joven, el taxista se dio a la fuga, aparcando su vehículo en un callejón sin salida de A Caeira. Sin embargo, devolver a la ubicación después de aproximadamente media hora y confesó su participación en el altercado.
Tras el incidente, el herido fue trasladado en ambulancia al hospital de Montecelo, mientras que el taxista, tras denunciar a la policía, fue trasladado detenido como presunto autor de un delito de tentativa de homicidio con resultado de lesiones graves.
Por último, aunque el controles de alcohol y drogas que le realizaron resultó negativo, el conductor del vehículo permanece bajo custodia policial a la espera de comparecer ante el tribunal. Un hecho que, de no producirse este sábado, supondrá el traslado del detenido a los calabozos de la Guardia Civil a la espera de ser citado ante el juzgado de turno.
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