El Tribunal Supremo ha confirmado la suspensión de empleo por cuatro meses impuesta a un agente de la Guardia Civil que se ausentó de su puesto de trabajo. Lugar de trabajo y fue encontrado en su automóvil en estado de ebriedad mientras aún se encontraba en el trabajo.
El agente llevó su caso al alto tribunal al considerar que la sanción era “erróneo, irracional y arbitrario” dado que consideró evidente que “no se encontraba en servicio cuando se produjo el consumo de bebidas alcohólicas y su posterior e inmediata intoxicación”.
Él Guardia Civil Pidió así que se anule la sanción por “falta muy grave” por “prestar servicio en estado de ebriedad” y que se apliquen dos sanciones por “falta grave”: una por ausentarse del servicio -lo que supone la pérdida de cinco días de salario con suspensión de funciones–; y otro por ebriedad fuera de servicio -lo que implica otra pérdida de cinco días de salario con suspensión de funciones-.
Los magistrados han insistido en que estaba “comprobado fuera de toda duda” que el agente tenía que trabajar de 15.00 a 23.00 horas y que fue encontrado en estado de ebriedad pasadas las 21.00 horas. Por lo que consideran que “La ebriedad sancionada se contrae al intoxicarse durante la realización de un servicio”.
En la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, se afirma que los hechos se remontan a una tarde de mayo de 2021, cuando la guardia civil se encontraba de guardia en la Comandancia del Aeropuerto de Alicante. Allí realizó tareas de apoyo al personal que realiza controles de salud a los pasajeros que llegan al aeropuerto.
Aunque se presentó en su trabajo “normalmente”, alrededor de las 8:00 p.m. un colega notó su ausencia y empezó a buscarlo “por toda la terminal del aeropuerto, incluidos los baños”. También lo llamó a su celular, pero no pudo localizarlo.
Como el agente no se presentó, consultaron las grabaciones de las cámaras de seguridad, que mostraban que “había salido del aeropuerto a las 20.13 horas conduciendo su vehículo particular”.
un ciudadano Lo encontró a unos 10 kilómetros de la zona y llamó al 112. El agente se encontraba en el interior de su vehículo, vestido de uniforme y con una tarjeta en el salpicadero del coche que le identificaba como agente de la Benemérita. La Policía Local acudió al lugar e informó a la Comandancia de la Guardia Civil.
Positivo en dos pruebas de alcoholemia
Una vez en el aeropuerto, Los agentes de tráfico le realizaron dos pruebas de alcoholemia., que arrojó resultados positivos. Además, los testigos que lo vieron ese día dijeron que el acusado “presentaba síntomas de ebriedad”.
La Dirección General de la Guardia Civil impuso una Sísuspensión del empleo por cuatro meses como autor de un delito muy grave por “cumplir en estado de ebriedad”. El Ministerio de Defensa, el Tribunal Militar Central y el Tribunal Supremo han confirmado el acuerdo.