La Audiencia de Valencia absuelve al expresidente de la Diputacin Alfonso Rus en una de las piezas del caso Taula


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No está probado que cometiera irregularidades a cambio de ‘mordiscos’ en la adjudicación de un servicio telefónico de la corporación. Tampoco hay condena para el ‘dinero adicto’, Marcos Benavent

El expresidente de la Diputación Provincial
El expresidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, en el juzgado.EM

La Sección Quinta del Audiencia Provincial de Valencia ha absuelto Alfonso Rusexpresidente de la Diputación Provincial de Valencia y exalcalde de Xtivade los delitos de prevaricación, malversación, tráfico de influencias en la pieza que lo sentó en el banquillo por el Caso Taulael macro caso que investiga la presunta corrupción que cobijó a la corporación provincial en los últimos años de gobierno del Partido Popular.

Los magistrados no ven probado que Rus, ni el ‘dinero adicto’ y ex directivo de Imelsa, Marcos Benaventesu suegro, Mariano López, dos familiares y dos funcionarios provinciales cometieron irregularidades en la adjudicación y prestación de los Servicio telefónico de la corporación provincial que en 2013 estaba encomendada a la empresa Servimun SL por 842.975,2 euros. Este ‘call center’ iba a facilitar el pago de los impuestos municipales a los ciudadanos de los municipios que delegarían la gestión y recaudación en la Diputación Provincial.

Anticorrupción defendió que detrás de Servimun estaba el suegro de Marcos Benavent, un hombre clave en Taula porque fue quien llevó los audios que dieron origen al caso a la Fiscalía. López recibió pagos del adjudicatario por “asesoramiento”, en lo que según la tesis del Fiscal, fue el cobro de una comisión por un fraude del que el presidente provincial tenía conocimiento. Por eso pidió penas de prisión de 8 años para Rus, 7 para Mariano López, 4,5 para Benavent, 6 para los funcionarios y 3 para los familiares implicados.

Sin embargo, el tribunal no lo ve así. Tampoco entiende que los pagos recibidos por Mariano López “carecieron de justificación” ni se ha encontrado “en el proceso ni una sola prueba que hable, ni de ‘instrucciones’, ni siquiera de ‘indicaciones’; no se ha encontrado ni un solo correo electrónico”. sido encontrado.” u otro tipo de comunicación” que en la adjudicación del servicio hubo “instrucciones de Alfonso Rus”, “quien tuvo, al inicio del proceso, la misma intervención que podría haber tenido cualquier otro diputado: su voto favorable”.

No ha habido indicios que permitan concluir que Alfonso Rus hubiera ejercido algún tipo de presión obtener una resolución, gracias a la cual un tercero se beneficiaría”, insisten los magistrados.

Esta es la tercera pieza que el exlíder provincial del PP pone en el banquillo. El primero, por la presunta contratación de trabajadores ‘zombis’ en las empresas públicas de la Diputación Provincial, está pendiente de sentencia y Anticorrupción pide 12 años de prisión para Rus por delitos de pertenencia a organización criminal, delito continuado de malversación de fondos fondos públicos, de prevaricación administrativa y falsificación de documento oficial cometida por funcionario público. El Fiscal le acusa de haber hechoo “contratación arbitraria” de miembros o simpatizantes del Partido Popular tanto en la empresa Imelsadependiente de la Diputación Provincial de Valencia, como en CiegsaEmpresa pública mercantil de la Generalitat adscrita al Departamento de Educación.

En siete años, Rus sólo ha visto un caso archivado: el que investigó el presunto pago de sobornos mediante sobrecostos en la construcción de escuelas por parte de Ciegsa. Fue a solicitud de la Fiscalía que acreditó el sobrecobro pero no que fue destinado a comisiones.

Las condenas de Taula se produjeron en un artículo en el que Rus no fue acusado. La Audiencia de Valencia condenó al ‘adicto al dinero’ a siete años y diez meses de prisión por los sobrecostes que una empresa pantalla, Themtica Events SL, había cobrado a Imelsa por distintos trabajos. Lo que no quedó demostrado es que estos sobornos fueran para financiar las campañas electorales del PP.

El exalcalde de Xtiva siempre ha defendido que el caso Imelsa nació de una “conspiración” política con el único objetivo de “mandar al PP a casa”.

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