La segunda deflación del IRPF en la Comunidad de Madrid ha iniciado su tramitación oficial tras pasar este miércoles por el Consejo de Gobierno, de donde pasará ahora a la Asamblea de Madrid. Según explicó el Ministro de Economía y Hacienda, Rocío Alberto, esta medida reducirá un 3,1 por ciento en todos los tramos, y también en el mínimo personal y familiar y las actuales deducciones autonómicas en el impuesto. Supondrá un ahorro del 4 por ciento para las rentas bajas, y del 1,7 para las rentas más altas, calcula el consejero.
Con el paso dado esta mañana, aseguró Albert, Madrid se convierte en la primera comunidad autónoma de régimen común que aprueba esta deflación durante dos años consecutivos. En esta segunda ocasión, Entrará en vigor en 2023, para que podamos aplicarlo en la declaración de impuestos sobre la renta de este año que se realizará la próxima primavera.
En total, la medida supondrá un ahorro fiscal de 153 millones de euros para los 3,5 millones de contribuyentes madrileños, y será más intenso en el caso de las rentas bajas, según un informe del Ministerio de Economía, Hacienda y Empleo dado a conocer este Miércoles al Consejo de Gobierno. Así, para una persona menor de 65 años con unos ingresos brutos de 25.000 euros y dos hijos (uno menor de tres años), supondrá un 4,08 por ciento menos respecto a 2022.
En otro ejemplo, con unos ingresos laborales de 32.000 euros, el ahorro será del 2,47 por ciento. Para los declarantes con rentas superiores (90.000 euros), la reducción será del 1,72 por ciento. Esta reducción en la escala autonómica del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas se llevará a cabo aplicando el incremento del IPC (3,1%) en los ocho primeros meses del año a todos los tramos, al mínimo personal y familiar, a las deducciones vigentes y a sus límite de ingresos.
De esta forma, explicó Albert, las personas cuyos aumentos salariales les hagan saltar de ese nivel también podrán seguir acogiéndose a deducciones que ahora están limitadas por el nivel de ingresos, incluso si dicho aumento es ‘devorado’ por la inflación.