El Gobierno distribuye a 1.400 inmigrantes en 11 puntos de la pennsula y avisa “por cortesa”


Actualizado

Se utilizarán cuarteles militares, hoteles y albergues repartidos por toda España

Un grupo de inmigrantes recibe
Un grupo de inmigrantes recién llegados de Canarias, en un hotel de la provincia de MálagaDaniel PérezEFE
  • Madrid El Gobierno trasladará a inmigrantes de Canarias a dos campamentos militares en Carabanchel y Alcalá de Henares
  • Medina del Campo Descontento en la Junta de Castilla y León con el Gobierno por no comunicar el traslado de 150 inmigrantes al balneario de Salinas

La descoordinación y la falta de información es generalizada en la distribución por toda España de los inmigrantes que están llegando en cayucos a la Islas Canarias. El Gobierno (y también la mayoría de ONG, excepto Accem) se niegan a dar cifras y no siempre se avisa con antelación a las Comunidades Autónomas y ayuntamientos de la llegada de estas personas.

Esta ola migratoria, consecuencia de la crisis social y política que Senegal desde el verano, está cerca de superar el conocido como crisis de canoa en 2006, lo que supuso el desembarco en las costas canarias de 31.678 personas. En 2023, según datos de Interior y cálculos de EL MUNDO, aproximadamente 28.000 lo han hecho, y no se espera que las llegadas por la ruta de Canarias cesen en las próximas semanas.

En los últimos días se han ido conociendo poco a poco, y siempre a través de los medios de comunicación y las redes sociales, las llegadas de estos inmigrantes a distintos puntos de España. Entre otros lugares, 321 han sido ubicados en un hotel cerrado en Almería, otros 200 en Mérida (a petición del alcalde) en un albergue juvenil y 250 en un balneario de Medina del Campo. Ayer, el diario El País informó de que el Gobierno, ante la situación de colapso que vive Canarias, prepara la apertura de casi 11.000 plazas en cuarteles, hoteles y albergues, incluidas dos instalaciones del Ministerio de Defensa situadas en el distrito de Carabanchel y en el municipio de Alcalá de Henares.

Desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, la cartera de la que dependen los adultos que llegan irregularmente, no da el número de personas que ya fueron trasladadas del archipiélago a la península. Están llegando a todas horas, tenemos que hacer traslados constantemente, dicen fuentes de la cartera que dirige José Luis Escrivá.. Nos volveríamos locos si tuviéramos que explotar todos esos números, añaden. Además, afirman que no están obligados a notificar el traslado a las Comunidades Autónomas ni a los Ayuntamientos, aludiendo a que estas entidades no tienen competencia alguna sobre estas personas. Una visita de cortesía se hace por lealtad institucional.

Sin embargo, esta advertencia ni siquiera ocurre en todos los casos. El presidente del Gobierno de Extremadura, María GuardiolaPidió ayer al Gobierno que ofrezca información, con el objetivo de estar preparado para poder atender a estas personas en las mejores condiciones posibles, y criticó la falta de coordinación que existe en esta materia.

Mar
María Guardiola, presidenta del Gobierno de ExtremaduraJ. MoralesEFE

Por su parte, la Comunidad de Madrid también exigió una actuación coordinada y que se les facilite información sobre el reparto. “Pedimos al Gobierno que colabore con otras administraciones públicas y no tenga que informarse en los medios de comunicación”, afirmó ayer el portavoz del Gobierno regional. Miguel Ángel García, quien añadió que el ministerio no ha solicitado recursos adicionales para el alojamiento de los desplazados, que el martes ascendían a un millar sólo en Madrid. Además, también cargó contra Escrivá tras acusarle Isabel Díaz Ayuso de utilizar un tono xenófobo e insolidario al afirmar que el Gobierno trata a los inmigrantes como una carga. No se trata de echar tinta de calamar y echarle la culpa a quien no la tiene. No busquen culpables fuera de su propio Gabinete, subrayó García, calificando de burdas las declaraciones del ministro.

Desde el ministerio de Escrivá explican que la distribución se realiza en base a dos criterios: las características de cada persona y las plazas disponibles en las diferentes localidades que tienen a su disposición. Tras desembarcar, los inmigrantes permanecen bajo custodia policial durante 72 horas y, posteriormente, el personal del ministerio desplegado en Canarias realiza una larga entrevista de la que se extrae un expediente con las características de cada persona, y en base a ello se les deriva a uno u otro lugar.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *