El relojero del Rey, José Antonio Gismera, lleva 32 años trabajando en el Palacio Real de Madrid. Cuando son las dos de la mañana a las tres, afronta el momento “más complicado” del año, pero también uno de los que más disfruta.
Muévete por los pasillos y habitaciones del Palacio Real a las diez y media de la mañana en un día laborable en el que no está previsto ningún acto oficial de la Familia Real es como intentar hacerlo en la calle Preciados los días…
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