Una semana después de que la Xunta presentara en el Parlamento los presupuestos de 2024, Comesaña defendió la dotación de 4,3 millones de euros destinados a la nueva salas de cardiología intervencionista (hemodinámica) y radiología intervencionista, incluido en las distintas actuaciones de renovación del complejo hospitalario. “Permitirán habilitar instalaciones definitivas para los nuevos equipos, adquiridos en 2023, y comenzar a operar en ubicaciones temporales”, trasladaron desde Sanidade.
La creación de una unidad de ictus fue un viejo reclamo apoyado por especialistas y grupos políticos. En julio del año pasado, el Parlamento aprobó -por consenso- una proposición no de ley que instaba a la Xunta a habilitarla.
El anuncio de Comesaña se produjo en la presentación del plan actualizado de atención al ictus. Un reajuste que “exorda dos últimos avances no diagnosticados por neuroimaxe y das melloras sin tratamiento endovascular”, detalló el responsable de Sanidad.
Según los datos aportados en la presentación, desde que se puso en marcha el plan de atención al ictus (2016) se han activado 15.332 códigos ictus, 3.072 fibrinólisis intravenosas y 2.070 trombectomías mecánicas. Comesaña advirtió que la patología cerebrovascular “es la primera causa de mortalidad en las mujeres y la segunda en los hogares”, y añadió que el Departamento considera el ictus “como un problema de salud prioritario”. La incidencia anual es de 200 a 250 casos por 100.000 habitantes.con una tasa de mortalidad de entre 24 y 84 muertes también por cada 100.000 personas.