El documento político definitivo que la formación ‘morada’ somete a votación de sus bases incorpora que Irene Montero “debería” continuar como ministra
La versión final del documento político que marcará el futuro de Podemos incluye una advertencia directa a Sumar: los votos de sus representantes en las instituciones “deben ser negociados y nunca regalados”. De esta manera, la formación vivienda Definitivamente abre la puerta a ir en solitario durante la legislatura pese a haber participado en coalición con la plataforma de Yolanda Díaz con la que también comparte grupo parlamentario en el Congreso de los Diputados.
En esta nueva estrategia -que se somete a votación por las bases entre este jueves y viernes- para intentar reforzar su liderazgo en el espacio a la izquierda del PSOE, el equipo de Ione Belarra también plantea que será una “fuerza autónoma” con voz.” “propia” y que “siempre tendrá su hoja de ruta, su programa, sus órganos de dirección y sus mecanismos de toma de decisiones liderados por la militancia y los inscritos”. “En ningún caso se disolverá en otro partido”, advierte.
La primera versión de este documento político ya incluía un mecanismo para impedir que dirigentes y afiliados de Podemos desembarcaran en Sumar y ayudaran a Díaz a hacer crecer a su costa su proyecto, el de prohibir la “doble militancia”. En la redacción final del mismo se ha dado un paso más al incorporar la referencia expresa de que su marca original nunca será diluida bajo otras siglas.
Además, se ha añadido la consideración de que Irene Montero es “un referente internacional” del feminismo, por lo que, añade, “debe seguir al frente del Ministerio de Igualdad para continuar las transformaciones y llevarlas más lejos”. Sin embargo, ante el escenario más probable de que acabe quedando fuera del nuevo Gobierno bicolor, añade que “debe seguir teniendo visibilidad y un papel fundamental” en la actividad política de Podemos, lo que le abriría la posibilidad de liderar una candidatura en solitario. a las elecciones europeas del año que viene.
Lo que se mantiene en el documento es la reivindicación de la “autonomía política” de la formación vivienda “sin renunciar” a estar “en ningún espacio”, afirmación que puede interpretarse tanto a nivel de confluencia de cara a nuevas designaciones con las urnas como también de rechazo a la salida del grupo parlamentario confederal. Además, destaca la vocación de formar parte de acuerdos de unidad electoral, pero condicionados a que la confección de las listas, a diferencia de las del 23-J, se haga a través de primarias abiertas y sin vetos.
En este sentido, también sostiene que en las últimas elecciones generales su partido actuó “con responsabilidad histórica, aceptando, ante el riesgo de que la derecha llegara al poder”, un acuerdo de coalición con condiciones y exigencias que “nunca son pidió “otra formación política”, en alusión a la exclusión de Montero, pero, añade, “los resultados no han sido los esperados”, “se ha perdido la mayoría progresista”, añadiendo “no mejor” la representación obtenida por Unidas Podemos en 2019 y “se ha revelado como un error no respetar el patrimonio político de las entidades que lo integran”.