La Audiencia Provincial de Madrid ha ordenado el ingreso en prisión del bailarín Rafael Amargo por incumplimiento de medidas cautelares y riesgo de fuga en relación con el juicio que se celebrará el próximo mes de abril por presunta venta de drogas en su anterior piso del barrio de Malasaña de la capital.
Según han informado a Europa Press fuentes jurídicas, el artista se encontraría actualmente en los calabozos de esta sede judicial a la espera de ser trasladado a la prisión de Soto del Real.
El auto de ingreso se acordó ayer después de que se celebrara una audiencia penitenciaria en la Sección 30 entre las partes a raíz del incumplimiento por parte de Amargo de la medida cautelar que debía firmar en el juzgado más cercano a su domicilio. Al parecer, el bailaor había solicitado firmar en la Audiencia Provincial de Madrid pero no lo hizo en varias ocasiones, lo que motivó la celebración de esta vista.
En el visionado, el representante de la Fiscalía de Madrid solicitó su ingreso en prisión por incumplimiento de medida cautelar y riesgo de fuga hasta que se celebre el juicio por esta causa.
Amargo será juzgado en abril junto a su productor de teatro y un socio por la presunta venta de estupefacientes en el barrio de Malasaña, hechos por los que el fiscal pide una pena de 9 años de prisión por un presunto delito contra la salud pública.
Otro caso por presunto narcotráfico
El artista también está siendo investigado por el Juez de Instrucción número 27 de Madrid por un delito de tráfico de drogas y atentado a la autoridad, tras una denuncia presentada el pasado mes de julio por sus vecinos en relación con la presunta venta de drogas en su piso. Calle Espíritu Santo de la capital.
Por estos hechos fue detenido el pasado mes de marzo en Alicante, quedando en libertad provisional. El juez le impuso la obligación de comparecer ante el tribunal cada dos semanas y le prohibió salir del país. Esta detención se suma a la detención del caso que ahora se juzga en la Audiencia de Madrid.
Amargo fue detenido el 1 de diciembre de 2020 junto a su pareja y dos personas más en el marco de la ‘operación Codax’, cuyo nombre significa cuervo en latín y recibe el apodo de una imagen de Amargo en su Instagram en la que aparece con unas alas de esta especie de ave.
Tras declarar, los detenidos fueron puestos en libertad con medidas cautelares como la retirada del pasaporte, la prohibición de salir del territorio nacional y la obligación de acudir a los tribunales cada quince días.
En su escrito de acusación, el fiscal solicita la misma pena para Juan Eduardo SB, asistente de producción de Amargo, por presuntamente actuar “conjuntamente” con el otro imputado en la compra y posterior distribución de dichas sustancias.
En su relato, el fiscal relata que, durante los meses de abril y diciembre de 2020, ambos “se dedicaron de manera concertada y persistente a la distribución de sustancias estupefacientes, entre otras metanfetamina, a terceros a cambio de dinero”.
Venta a terceros
Para ello, los dos acusados adquirieron la sustancia “de forma conjunta” a los diferentes proveedores, para posteriormente distribuirla entre ellos y venderla a terceros.
Así, el bailarín supuestamente vendía las sustancias estupefacientes a personas que acudían a su domicilio en Madrid y en otras “enviaba la sustancia al lugar que le indicaba el cliente, para lo que recurría a su hombre de confianza, el también imputado Manuel Ángel BL”. Otro de los socios de Amargo, sabiendo lo que llevaba, después de hacer la entrega correspondiente, regresó al domicilio para entregarle el dinero obtenido de la venta.
A modo de ejemplo, la Fiscalía informa que el 27 de abril de 2020, Manuel Ángel, para quien pide seis años de prisión, fue sorprendido por la Policía cuando se disponía a entregar a un cliente, a cambio de 50 euros, una bolsa de sustancia. que resultó ser metanfetamina; sustancia que había recogido minutos antes en el domicilio de Amargo, “donde tuvo que regresar para entregar el dinero”.
Asimismo, como consecuencia de los dispositivos de vigilancia que se establecieron sobre su domicilio, la policía nacional pudo observar “cómo acudieron numerosas personas que, tras entrar en el mismo y permanecer unos minutos en su interior, volvieron a salir apresuradamente, y los agentes se procedió a identificar a dos de ellos, en relación con una sustancia estupefaciente que había sido adquirida en dicho domicilio, y se levantó el acta de detención correspondiente.
Mediante auto dictado el 1 de diciembre de 2020 por el Juzgado de Instrucción número 48 de Madrid se autorizó la entrada y registro del domicilio de los imputados.
En el caso de la bailarina, los agentes incautaron 3 frascos que contenían sustancia Popper (nitritos de alquilo), una bolsa que contenía una sustancia que resultó ser feniletilamina con un peso neto de 0,089 gramos y un frasco que contenía 6 mililitros de GBL con valor de mercado. de 314,19 euros cuando se vende el gramo.
En el caso de Juan Eduardo, los agentes encontraron un frasco que contenía una sustancia que resultó ser metanfetamina, con un peso neto de 4.466 gramos y una pureza del 76,4%, con un valor de mercado de 115,67 euros vendido por gramos; una bolsa que contenía una sustancia que dio positivo a ketamina, con 50,4% de pureza; y MDMA con una pureza del 6,9% con un peso neto total de 0,185 gramos con un valor de mercado de 18,5 euros al venderse el gramo.