La renta agraria de Castilla y León se situó en 2.685,9 millones de euros en 2022, según la primera estimación de las Cuentas Económicas de la Agricultura (CEA) publicada hace unos días por la Junta, un año que “no fue bueno” y en el que se contrajeron los ingresos de agricultores y ganaderos en un 16,2 por ciento, con 517 millones menosrespecto a 2021. “Sobre mojado llueve”, y este año, con una sequía rampante y una cosecha muy pobre, Asaja estima “el peor o uno de los peores datos económicos de la historia reciente” para el sector, por debajo de los 2.000 millones de euros, informa Ical.
Desde 2010, sólo los años 2014 se sitúan por debajo de esta cifra de ingresos, con 1.987 millones de euros; y 2017, con 1.797 millones, lo que contrasta con el magnífico año de 2021, cuando estalló el Covidy el campo alcanzó unos ingresos de 3.203,34 millones, según datos facilitados por el Ministerio de Agricultura.
Vale recordar que este año, el producción de cereales se situó en 3,24 millones de toneladas, con una reducción del 52 por ciento respecto al promedio de los últimos cinco años (6,7 millones de toneladas) y un 37 por ciento inferior al el de la temporada pasada, que fue de 5,2 millones de toneladas. La cifra es la segunda peor de este siglo, solo peor que la de 2017, cuya producción fue de sólo 2,7 millones de toneladas.
El presidente de Asaja, Donaciano Dujosentenció Ical, que “este va a ser uno de los peores años de la historia reciente o el peor, porque sin duda se sumará a la baja cosecha, los costes más altos de la historia, con 500-1.000 euros más por hectárea, que conduce a una rentabilidad muy baja. «Nunca hemos gastado tanto para ganar tan poco»lamentó el dirigente agrario, que dio por hecho un “resultado negativo más que nunca, por debajo de los 2.000 millones”, sino a las subidas de precios de productos como la leche o la carne.
Inflación
Las Cuentas Económicas de la Agricultura destacan que el proceso inflacionario del consumo intermedio Ya había comenzado en 2022, cuando los profesionales del sector gastaron 5.377,1 millones de euros en insumos, lo que supone un incremento del 25,9 por ciento respecto a la cifra de 2021. Para ilustrarlo, basta con mirar ver la evolución del gasto de tres factores básicos de producción, como son la energía y los lubricantes; fertilizantes y enmiendas, y piensos para el ganado. Estos últimos supusieron el año pasado un gasto para el sector de 2.979,4 millones de euros, con un incremento del 28,6 por ciento. Energía, por su parte, representó un desembolso de 508,1 millones, con un crecimiento de 51,8 por ciento; mientras que los fertilizantes costaron 723,2 millones, un 37,7 por ciento más.
frente a esto costos en aumento, La producción de cereales durante 2022 tampoco fue buena, con un valor de cosecha de 1.998,8 millones, lo que supone un descenso del 11,9 por ciento respecto a 2021. La producción de hortalizas ascendió a 316,8 millones, un 1,3 por ciento menos.
Por el contrario, el valor de la producción de papa (246 millones de euros), se disparó un 86,8 por ciento; el de fruta (228,4 millones), 24,8 por ciento; el de Plantas industriales (440,8), 19,2 por ciento; y forraje (467,1), 12,5 por ciento. También cabe señalar que hubo aceite de oliva en 2,1 millones, con un aumento del 34,4 por ciento; y vino y mosto, por 104,8 millones, un uno por ciento por encima de la cifra de 2021. En total, la producción vegetal ascendió a 3.812,6 millones, apenas un 0,1 por ciento más que en 2021.
En cuanto a la ganadería, la CEA indica que la producción animal ascendió a 3.836,3 millones de euros en 2022, con un incremento del 19 por ciento. La carne y la ganadería sumaron 2.694,9 millones, un 14 por ciento más que en 2021; y productos animales, 1.141,4 millones, con el 32,5 por ciento.
Dentro de la carne y el ganado, la producción ovina y caprina sólo disminuyó un dos por ciento, hasta 204,3 millones. La carne de ave (274,6 millones de euros) aumentó un 18,3 por ciento; la carne de cerdo (1.464,7 millones), el 15,7 por ciento; bovinos (706,1), 15,1 por ciento; y equino (8,3), 3,7 por ciento. En cuanto a productos animales, la leche (vaca, oveja y cabra), sumó 766 millones de euros, un 24,4 por ciento más; y los huevos, 348,9 millones, con un enorme incremento del 64,3 por ciento.
La producción total del campo se situó así en 7.941,6 millones de euros en 2022, menos 5.377,1 millones de euros de consumo, lo que supone un valor añadido bruto de 2.564,4 millones de euros, un 15,9 por ciento menos que en 2021. Las amortizaciones aumentaron un 6,8 por ciento, con 788,8 millones, que Da un valor añadido neto (restado del bruto), de 1.775,7 millones, con un descenso del 23,1 por ciento.
A este dato se suman otras subvenciones, 953 millones, con un incremento del 1,9 por ciento; y se restan otros impuestos, 42,7 millones, que crecieron un 3,6 por ciento, para una renta agraria de 2.685,9 millones, con una caída del 16,2 por ciento.