Vale la cara y vale la cruz



El pasado fin de semana el Barcelona perdió el Clásico, pero merecía ganar. Esta vez fue mucho más bajo que el sociedad realpero tenía la pegada, la habilidad o el saber sufrir de los grandes para ganar sin merecerlo. Xavi Hernández Siempre tienes una forma de argumentar el resultado pase lo que pase y es que merece la pena cambiar de opinión sin que nadie diga nada. Si el presidente del Gobierno lo hace sin sonrojarse y hasta con media sonrisa, cómo no podrán hacerlo en el fútbol.

En el eterno rival utilizan el mismo decálogo. Eligen el mensaje según su interés. Durante muchos años, el criterio con los salarios de las estrellas se utilizó como modelo para justificar lo bien que siempre cuadran las cuentas en el Bernabéu. Ahora si quieres firmar Kylian Mbappé Tendrá que cobrar el triple que el siguiente en el ranking y sin compartir ninguno de los famosos derechos de imagen. Lo que antes era inaceptable en el Real MadridAhora sería un maravilloso trabajo de ingeniería financiera fichar a un galáctico.

Cuando nada de lo dicho antes importe y lo que se llamaría mentiras ahora sean cambios de opinión, todos los argumentos serán válidos. Es fácil, sólo tienes que decir lo que te interesa en cada momento. Además, siempre habrá fans sin memoria que los compren. Por el Barça, por el Real Madrid o por el interés de España.

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