Primer Ministro de Israel Benjamín Netanyahu advierte que será el encargado de controlar Gaza para siempre. Tel Aviv, que ya pidió la dimisión de Guterres hace unas semanas, le ha vuelto a responder. Ellos dijeron eso “Debería darme vergüenza” han hecho tales declaraciones. “El camino a seguir es claro: un alto el fuego humanitario. Ahora”, afirmó el jefe de la ONU ante la prensa en Nueva York.
La ayuda no es suficiente.
Guterres afirma que Israel “continúa bombardeando y golpeando a civiles, hospitales, campos de refugiados, mezquitas, iglesias y edificios de la ONU”, y que Hamás “Utiliza a civiles como escudos humanos y continúa lanzando cohetes indiscriminados contra Israel”. La situación humanitaria en la Franja es crítica. La población intenta dirigirse al sur del enclave para evitar las bombas, aunque sin éxito. No hay escapatoria.
La ayuda que llega desde Egipto a través del cruce de Rafah no es suficiente, ya que no incluye combustible, afirma Guterres. Y es que, sin combustible, el agua no se puede purificar y los bebés en incubadoras o los pacientes conectados a respiradores morirán. También le preocupa “el aumento del antisemitismo y también las críticas contra los musulmanes” y apuesta por una solución “basado en dos estados, con israelíes y palestinos viviendo en paz y seguridad”.
Un fondo de 1.200 millones
El Secretario General de la ONU ha anunciado el lanzamiento de un Fondo de 1.200 millones de dólares para 2,7 millones de palestinos, tanto los de Gaza como los de la ocupada Cisjordania, que también vive una situación extrema por las ofensivas de Israel. El portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric, reveló que esta cifra se ha calculado teniendo en cuenta las necesidades de todas las agencias de la ONU que trabajan en Palestina.
La ONU pretende tener listo un fondo para cuando las condiciones de acceso mejoren. “Debemos actuar ahora para encontrar una salida a este callejón sin salida de destrucción brutal, terrible y agonizante”, dijo en el discurso de Guterres.