“Cuando se intenta amnistía la violencia no se puede dar ninguna lección”, afirmó el líder del PP.
“De un lado están los que cometen o amnistían actos violentos o antidemocráticos y del otro, los que condenan a unos u otros, y fin de la historia, no hay más historia, no hay más divisiones que esta”. Alberto Nez Feijo Este miércoles se rebeló contra las críticas por no haber condenado ayer expresamente los episodios violentos y las consignas antidemocráticas de algunos de los manifestantes que protagonizaron disturbios en Madrid en protesta contra la amnistía.
Con mucha mayor fuerza que en otras ocasiones, el presidente del PP quiso cortar de raíz el debate sobre su falta de convicción. Durante su intervención en una sesión parlamentaria de su partido contra la amnistía, aseguró: “Aunque los profesionales de la manipulación y la mentira siempre dicen que no lo tengo claro, tengo que decir que la violencia no tiene cabida en la democracia y siempre debe ser rechazada”. Ya sea por parte de ultras de extrema izquierda o de extrema derecha, la violencia no tiene lugar en la democracia y tampoco la impunidad”.
“No vamos a aceptar ni un solo escarmiento de quienes están trabajando para que los actos violentos” del independentismo “queden impunes”, ha tratado de zanjar la cuestión. Dicho esto, Feijó ha señalado Pedro Sánchez como “el máximo responsable de lo que está pasando en España, porque sus decisiones están destruyendo la democracia”, y le ha deshonrado que critica, a su juicio, sólo una parte de la violencia.
“En las últimas horas hemos escuchado a miembros del PSOE decir que quien no condena la violencia la fomenta, y creo que tienen razón”, sostuvo, antes de soltar la carga de profundidad: “Cuando se intenta amnistía la violencia, no se puede dar alguna lección a quienes condenan la violencia”.
“Quienes defendemos el Estado de derecho somos acusados por quienes lo violan”, se quejó Feijó. Nadie va a poder frenar “la oposición cívica al despropósito” de la amnistía, añadió, antes de llamar a la ciudadanía a sumarse a las “manifestaciones pacíficas en defensa del Estado de derecho” que el PP ha convocado para el domingo ( aunque el partido no las había llamado hasta ahora “manifestaciones”, sino “mítines”.
Para el líder del PP, la posible amnistía por los delitos del ‘procés’ “es una aberración democrática desde el punto de vista político, una indecencia desde el punto de vista moral e ilegal desde el punto de vista jurídico”, y su exposición de motivos deberá tener sólo tres palabras: “Por siete votos”.
En cualquier caso, lo dice basándose en lo que ha sabido a través de Junts o ERC, porque el PSOE dice no tener noticias de las negociaciones: “Todo este proceso se está tramitando con un manto oculto. No tenemos la información mínima. El Gobierno no ha informado nada. Ni siquiera sabemos dónde está el presidente. Es una situación sin precedentes. En ningún país de la UE el candidato puede ser presidente mediante una amnistía.” “Y eso no significa paz porque aquí no hay conflicto. Debilita el Estado de las comunidades autónomas, porque sólo beneficia a una, y pone en jaque el Estado de Derecho”, añadió.