Acude este sábado al congreso de los socialistas europeos en Málaga mientras urge la cuenta atrás para la repetición electoral: se activará el 27-N
Han pasado más de 100 días desde las elecciones generales y, aún así, Pedro Sánchez llegará este sábado al congreso que los socialistas europeos van a celebrar en la ciudad de Málaga sin haber conseguido jurar como presidente. El equipo del candidato a la reelección esperaba haber firmado para entonces el acuerdo con Junts, el último gran obstáculo que queda para completar la mayoría heterogénea necesaria en el Congreso de los Diputados, pero en los últimos días las negociaciones se han enquistado, trastocando la Hasta ahora, la última previsión era que la votación sería esta semana.
El secretario general del PSOE no pudo comparecer con este trámite resuelto en la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE), que se celebró hace un mes en Granada. Fue en ese marco institucional en el que, escoltado por las máximas autoridades de los 27, se refirió por primera vez a la “amnistía” llamándola por su nombre y la justificó como “una forma de intentar superar las consecuencias jurídicas de la situación”. que “vivimos en España una de las peores crisis territoriales”.
Precisamente las discrepancias con el partido de Carles Puigdemont sobre el texto de la ley que regula esta medida de gracia para los implicados en el referéndum ilegal de independencia en Cataluña de 2017 han impedido que Sánchez pueda reencontrarse con sus suegros como presidente sin la etiqueta de “en funciones”. La dimisión esta semana de su homólogo portugués y socio energético, Antonio Costadespués de que trascendiera que está siendo investigado por los presuntos delitos de prevaricación, corrupción y tráfico de influencias en la adjudicación de negocios de litio e hidrógeno verde, ha contribuido a empañar el cónclave de los socialistas europeos.
El primer revés que sufrió Sánchez en sus planes para la reedición de un gobierno de coalición con Sumar se produjo el 22 de agosto con el encargo del Rey al líder del PP, Alberto Núñez Feijó, como candidato a la investidura en un pleno que se celebró a finales de septiembre en el que no logró la mayoría requerida. Han pasado las semanas desde entonces y el candidato a permanecer al frente de La Moncloa sigue intentando recoger los votos que le faltan mientras empieza a acelerar la cuenta atrás para la repetición electoral: si 27 de noviembre no ha sido reelegido, se convocará automáticamente a un nuevo nombramiento con las urnas para el 14 de enero.
En este periodo de espera, el secretario general del PSOE viaja el sábado a Málaga para cerrar un congreso de dos días en el que los socialistas europeos fijarán sus prioridades de cara a las elecciones al Parlamento Europeo de junio de 2024. La decisión “crucial” a la que se enfrenta la UE es si continúa avanzando “por el camino que trazó desde sus orígenes” o, por el contrario, regresa a “tiempos oscuros ya olvidados”, como afirma en Ferraz.
Socialismo en retirada
El socialismo está en declive en Europa desde 2019 debido a la fuerza del centro derecha y la extrema derecha, lo que ha dado lugar a alianzas como en Suecia y Finlandia. A la dimisión de Costa, único presidente de esta corriente política que ahora gobernaba con mayoría absoluta y a las probables nuevas elecciones en Portugal a las que el partido acudirá lastrado por las sospechas de corrupción, se suma la incertidumbre sobre si finalmente Sánchez poder ser elegido. reelegidos, ya que de momento siguen confiando en Ferraz.
Los socialistas encabezan otros cuatro gobiernos en Europa: Alemania -donde Olaf Scholz gobierna de forma tripartita con los Verdes y los liberales-, Dinamarca, rumano y malta. Además, forman coaliciones en cuatro estados miembros: Bélgica, Eslovenia, Estonia y Luxemburgo.
Sánchez asiste a la reunión en la que se marcarán los pasos para el futuro más inmediato de esta familia política, ostentando los títulos de presidente de la Internacional Socialista y presidente en funciones de la UE pero sin haber conseguido, tres meses después, lo más ansiado: que del presidente español ya reelegido.