Según informó el Ayuntamiento, los agentes estaban trabajando en Ponte Nova y le dieron el alto. Dado este, el hombre comenzó a acelerar y se dio a la fuga con dirección a la calle Alfredo Brañas.
Entonces, comenzaron una persecucion que continuaba hasta la calle San Silvestre y la carretera de Barra de Miño. El vehículo circulaba a excesiva velocidad, lo que ponía en peligro la seguridad de los usuarios de la vía.
En el camino a Barra de Miño dos patrullas intentaron interceptarlo pero el conductor los evadió adelantándolos a gran velocidad y poniendo en riesgo a los agentes que tuvieron que hacerse a un lado para no atropellarlos.
La persecución continuó hasta llegar a la calle Río Conso donde el conductor, al observar que la vía no tenía salida, huyó a pie por la vía hasta que fue interceptado ocultándose entre unos arbustos.
El conductor dio prueba de drogas positiva y durante la persecución, según el atestado policial, realizó numerosas maniobras temerarias. Por todo ello, iniciaron las diligencias judiciales correspondientes.