Alcalá de Henares empezó ayer a recibir respuestas del Gobierno sobre la llegada inminente de 1.134 inmigrantes irregulares procedente de las Islas Canarias Cuartel Primo de Rivera. Los hombres y mujeres llegarán en tres fases desde el 20 de noviembre hasta finales de diciembre, con 378 personas en cada una de ellas. Se espera que se queden hasta marzo, pero la Delegación del Gobierno cree que muchos de ellos saldrán antes, dado que están en régimen abierto y no están detenidos.
La videoconferencia que Alcaldesa de Alcalá, Judith Piquetmantenido con el directora general de gestión del sistema de acogida de Protección Internacional y Temporal, Amapola Blasco, duró aproximadamente una hora y fue cordial. Nada que ver con el tono tenso que había mostrado el ministro José Luis Escrivá con ella en las redes sociales, tras leer en la entrevista en torrevieja news today que estaba preocupado por la seguridad en la ciudad ante la falta de un plan del Gobierno.
Piquet lamenta que la Diputación la haya tildado de xenófoba y racista por relacionar la llegada de inmigrantes irregulares con la seguridad de las calles de su municipio. Pues bien, ayer el Gobierno reconoció que se pondrá en marcha un plan de seguridad específico. “Después de que la Delegación del Gobierno criticara que convocáramos a la Junta de Seguridad y nos insultaran por ello, reconocieron que hace falta un plan de seguridad y que el campamento tendrá seguridad privada y cámaras”, afirman fuentes cercanas al alcalde, que escucharon a la explicación con “estupor”, al comprobar que el plan no está hecho y que será presentado a posteriori, cuando los inmigrantes ya estén aquí.
Al final se llegó a un acuerdo para coordinar a la policía local y nacional, ya que la responsabilidad de cualquier hecho que ocurra fuera del recinto recae tanto en los cuerpos como en las fuerzas de seguridad. En esta línea, se creará una comisión para coordinar todos estos servicios. En el cuartel habrá guardias de seguridad privada, cámaras de videovigilancia y controles de acceso específicos.
“Después de insultar al alcalde, a la vicedelegada y a la ministra, los técnicos del ministerio coinciden con nosotros en que era necesaria la coordinación en materia de seguridad ciudadana”, insisten en Alcalá.
Explosivos
Según la información facilitada por la Delegación del Gobierno al alcalde, que tenía una larga lista de cuestiones técnicas, los inmigrantes dispondrán de un servicio médico y de enfermería dentro del cuartel. Además, se está construyendo una barrera para separar la zona civil de la militar dentro del cuartel. Piquet había preguntado específicamente si existía la posibilidad de que los inmigrantes accedieran a una zona de armas o explosivos en el cuartel, pero no recibió respuesta.
El horario que tendrán los inmigrantes para entrar y salir del centro es de nueve de la mañana a diez de la noche. Contarán con canchas de fútbol y baloncesto. Además, habrá un funcionario del Ministerio de Migraciones que actuará de enlace con el campamento y los servicios públicos del ayuntamiento para cualquier cosa que sea necesaria.
La Delegación del Gobierno se comprometió a invitar al alcalde a ver el cuartel cuando esté montado y habilitado, y también a crear una comisión de seguimiento. De momento, la concejala sigue esperando recibir una invitación, porque nadie del Gobierno se ha dirigido a ella.
En una segunda parte del encuentro se trataron temas más políticos, respecto a los planes que pueda tener el Gobierno si continúa la presión migratoria. Desde el ayuntamiento de Alcalá de Henares lamentan que la Delegación del Gobierno haya dejado “dudas” sobre la mesa. “Aún quedan sombras sobre la gestión de esta crisis migratoria por parte del Ministerio que preside José Luis Escrivá”, lamenta el equipo de alcalde del PP.
CIE “encubierta”
“Nos dicen que la previsión es que estas personas estén hasta marzo, pero no se comprometen a cerrar ese mes el centro temporal de Alcalá de Henares”, apuntan. Por ello, sospechan que la idea es crear un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) “encubierto y entre bastidores” sin tener en cuenta la opinión del Ayuntamiento y de los vecinos de Alcalá.
«Al final creo que vamos a tener un goteo incesante de inmigrantes en los próximos meses. Pero lo que más me preocupa es la falta de previsión del Gobierno de Sánchez ante la crisis migratoria, eso es lo que he visto”, denuncia Piquet en torrevieja news today.
Cuartel de Arteaga
Mientras, en la capital madrileña, los primeros 170 inmigrantes canarios llegaron ayer a la sede de Arteaga, en el barrio madrileño de Carabanchel, que “ya está funcionando sin incidencias”. Así lo anunció el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, tras confirmar que ya está operativa la primera fase de este Centro de Emergencias, Acogida y Derivación, con 420 plazas disponibles.
En las próximas semanas ampliará su capacidad hasta llegar a 1.220. Según el Ministerio que dirige Escrivá, Cruz Roja Española será la encargada de la gestión.
Precisamente, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, se mostró “profundamente decepcionado” con la gestión que está llevando el actual Gobierno con la crisis migratoria, y criticó que el ministro “se lave las manos”. “No nos dan criterio de reparto, no saben cuánto tiempo estarán allí”, explicó el alcalde, que no ocultó su preocupación por la falta de información por parte del Gobierno.