Esto afecta especialmente a zonas donde el turismo es muy importante como Costa Brava, donde cada verano se podrían perder hasta 500.000 visitantes. Por este motivo, la medida no ha sido bien recibida por gran parte de los propietarios de la Costa Brava que rechazan esta medida.
Polémica en Cataluña
De hecho, del total de viviendas registradas para este uso, el 42% se encuentran en la Costa Brava. Para los expertos en vivienda, la decisión no solucionará los problemas existentes. David Riba, de la Asociación Catalana de Apartamentos Turísticos, explica que solucionar los problemas de vivienda que hay es competencia de la administración y lo que están haciendo es echar la responsabilidad a los propietarios.
Algo parecido explica Ferrán Fuenteportavoz de apartamentos.com: “El hecho de que una propiedad ya no esté en el mercado turístico no significa que esa propiedad se convierta en un alquiler a largo plazo ni que su precio sea barato.
Sin embargo, los vecinos de las zonas tensionadas celebran la posible llegada de esta medida. José Ramón FernándezUn vecino del Raval, explica que viven en una zona muy tensa y que a la gente que quiere quedarse en el barrio le cuesta encontrar una vivienda que se adapte a su situación salarial.
Sin embargo, esta es una medida que aún debe ser validada en el Parlamento de Cataluña.