Epifanio y Concha abrieron el Hostal Restaurante Alarico hace 33 años, un negocio que sus hijos continúan hoy: Bruno, Marian, Begoña (ya jubilada) y José Ignacio que, con la ayuda de un equipo de profesionales, hacen del lugar una referencia tanto para aquellos que buscan alojarse en un lugar con encanto, en pleno centro del pueblo, como para aquellos que quieran disfrutar de una cocina casera elaborada con los mejores ingredientes de la zona.
Las mañanas comienzan en el establecimiento con desayunos completos con buen café, bollería, tostadas, fruta, brochetas, zumos… para empezar con energía. A la hora del almuerzo, destaca una carta en la que manda la cocina casera y tradicional En invierno, el cocido se convierte en el plato estrella, además de las carnes y pescados frescos. Para los que prefieren un menú más informal, tienen propuestas como bocadillos fríos y calientes, bocadillos, ensaladas, hamburguesas o raciones de croquetas caseras de jamón, raxo, revueltos, frángulas (nguets caseros)… Todos ellos se pueden disfrutar tanto en el interior como en la terraza.
Respecto al albergue Tiene 14 habitacionesApartamento tres individuales y uno familiar, totalmente equipados.