Tras la investidura, el siguiente paso es la formación del Ejecutivo. Habrá reducción de carteras y cifras para contrarrestar al PP
La Ley de Amnistía está causando un mal momento al PSOE. Un mal trago, como lo definen muchos dirigentes socialistas. Pero para endulzar el sabor de boca, Pedro Sánchez tiene en el recámara tres caramelos con los que intentar reducir la acidez y el malestar. En primer lugar, consumar su investidura entre hoy y mañana. En segundo lugar, formar un nuevo Ejecutivo que renueve el mandato de la coalición progresista, en este caso, entre PSOE y Sumar. Y una tercera píldora será desplegar una potente agenda social para neutralizar el desgaste provocado por la amnistía.
Superado el trance de acordar la amnistía, el PSOE mira ahora hacia los ministerios. Ayer se celebró el último Consejo de Ministros del Ejecutivo que arrancó en enero de 2020 y que sufrió una importante remodelación en julio de 2021. Empiezan a moverse nombres, quinielas… La incertidumbre reina entre quienes ahora ostentan cartera y, también, entre quienes que creen que pueden aspirar a uno. Sólo hay una o dos personas con armadura. Nadie más tiene garantizado el cargo ni su continuidad, afirman fuentes del Gobierno, en alusión a que es seguro que Pedro Sánchez será presidente y Yolanda Díaz ocupará una vicepresidencia. Desde allí…
Otra certeza. Todas las fuentes consultadas, en el Gobierno, PSOE y Sumar, dan por hecho que Podemos quedará fuera del reparto ministerial. Eso Ione Belarra y Irene Montero No repetirán y ningún miembro actual de la formación morada se sentará en el Consejo de Ministros.
Una certeza más. Habrá reducción de carteras. Será un gabinete más contenido que el actual (22 ministerios). En las mentiras socialistas se baraja un reparto que podría ser de 13 carteras para el PSOE, 5 para Sumar.
Altas fuentes gubernamentales y socialistas consultadas por este diario coinciden en que el próximo gabinete será más político que el actual. Ser un gobierno político, explicar mucho, explicar continuamente todo lo que hacemos. Los socialistas saben que la legislatura no será fácil, que la oposición de PP y Vox va a ser dura y también tienen la experiencia de que en estos años les ha costado imponer su relato y su mensaje a más de uno. ocasión. Se traslada la necesidad de ministros que defiendan, ataquen, contraataquen; Tienen pegada y fondo.
Grupos de nombres
En Sumar también creen que ese perfil político es necesario, sumado a la necesidad de rentabilizar sus carteras, y eso explica la apuesta por nombres como Ernest Urtasun, actual portavoz de Sumar, o Mónica García, líder de Más Madrid. Esta formación asumió que no tendría coportavoz en el Congreso a la espera del ministerio, presumiblemente de Sanidad. También Sira RegoEurodiputado y elegido por IU como su candidato a Ministerio, en lugar de Alberto Garzónquien previsiblemente también sucederá como coordinador federal de IU.
A estas alturas, en el seno del Ejecutivo y del PSOE se da por hecho que la crisis de Gobierno de julio de 2021 fue un fracaso. Querían darle una nueva cara al Ejecutivo, más mujeres con experiencia en gestión municipal, una imagen distinta a la de la pandemia, pero Sánchez quedó desatendido por los escuderos políticos -se fueron, por ejemplo- carmen calvo y José Luis Balos, dos escudos importantes-. En el gabinete actual hay cuatro ministros políticos, como se les llama: Flix Bolaos, María Jesús Montero, Pilar Alegra y Isabel Rodríguez. Los dos primeros dan por hecho en el PSOE que continuarán -han pilotado los pactos que dan la investidura a Sánchez-, quizás incluso con más peso. Alegra también suena a valor al alza aunque, quizás, cambiando de cartera y saliendo de Educación. Sobre Rodríguez hay dudas.
Cualquiera puede salir o entrar. La que menos te esperas es la reflexión que transmiten las fuentes. Eso está sólo en la cabeza del presidente.
Con estos recaudos, las personas consultadas en el Gobierno y el partido también dan por segura la continuidad de Teresa Ribera. era de número dos por Madrid como boleto de Sánchez, lidera la Transición Ecológica, una gran apuesta de Sánchez, y ha sabido desenvolverse bien en Europa. También se destaca el peso de José Manuel Albares y su cercanía con Sánchez, aunque Asuntos Exteriores ha estado sujeto a cambios.
Los focos también apuntan a barones que fueron destronados en las comunidades autónomas, como, por ejemplo, Ximo Puig. El valenciano está en la piscina de muchos, lleva mucho tiempo entre nosotros, pero… O, incluso, cicatriz lopezEl jefe de gabinete de Sánchez, que, según fuentes socialistas, estaría dispuesto a dar el paso.
Una autoridad económica por encima de Díaz
Yolanda Díaz, como líder de Sumar, será vicepresidenta en el próximo Gobierno. Se supone que mantendrá la cartera de Trabajo y no se descarta que amplíe sus competencias. Esto implica que Sánchez tuvo que colocar una cifra económica arriba para no dejar a Díaz como referente. Hasta ahora era Nadia Calvio, pero está a la espera de ver si es elegida para presidir el Banco Europeo de Inversiones, lo que le impediría estar en el Gobierno. Sánchez deberá decidir si la apoya o no antes de conocer su futuro.