La Policía ha conseguido lo que hace sólo 72 horas parecía imposible: que el debate de investidura de Pedro Sánchez se desarrollara con absoluta normalidad y sin tener que intervenir para restablecer el orden en el entorno del Palacio de la Carrera de San Jerónimo. Sin duda, esa fue la cara de la moneda; la cruz, que la tensión sigue en las calles y que dos semanas después del inicio de las concentraciones en Ferraz, sede federal del PSOE, todavía hay disturbios protagonizados por un puñado de elementos ultra cuando los asistentes empiezan a disolverse, como también ocurrió la pasada noche. La protesta de este jueves fue una de las más importantes, cuando, según la Delegación del Gobierno, se reunieron alrededor de 4.000 personas. Entre los asistentes, uno de los líderes de Vox, el diputado nacional Javier Ortega Smith.
La decimocuarta concentración frente a la sede del PSOE siguió la Mismo patrón que los anteriores.. A partir de las 19.30 horas empiezan a llegar los manifestantes y a las 21.00 horas se producen los habituales cánticos contra el presidente del Gobierno, los pactos con los independentistas o contra la prensa. Todo ello con multitud de personas portando banderas españolas y otros emblemas. A partir de esa hora, los ultras toman el mando de la concentración y comienzan a lanzar botellas de vidrio u otros objetos a los antidisturbios de la Policía Nacional o a los medios de comunicación. Ayer, por ejemplo, Un globo de pintura golpeó la cara de un camarógrafo.que necesito atención médica.
Es al filo de la medianoche cuando los ultras intensifican su protesta y acaban derribando las vallas protectoras que les separan de la Policía, momento en el que los agentes tienen que cargar bajo la presión de bengalas y lanzamiento de objetos contundentes. Durante la noche del jueves volvió a ocurrir, cuando la mayoría de los manifestantes ya habían abandonado el lugar, entre ellos el líder de Vox Javier Ortega Smith. La policía arrestó al menos a diez personas y continuaron las cargas y lanzamiento de bengalas y todo tipo de objetos contra los agentes. Los incidentes continuaron, como el miércoles, en los alrededores de la calle Princesa, donde ardieron varios contenedores. Siete personas resultaron levemente heridas, entre ellas un policía..
Una vez iniciadas las cargas contra los encapuchados, la Policía desplegó las furgonetas por la calle Marqués de Urquijo con el objetivo de conseguir una mayor efectividad en la disolución de la protesta. Los incidentes se trasladaron hacia los alrededores del La calle Princesa, en cuya entrada de Metro se refugiaron muchos manifestantes ante los altercados. Las cargas también se dirigieron hacia las calles Alberto Aguilera y Gaztambide, donde ardieron varios contenedores. A partir de la una y media de la madrugada del viernes la situación estaba controlada, aunque la Policía siguió a algunos grupos ultra por el barrio de Argüelles.
Entre los 15 detenidos Tras los altercados de la noche del miércoles en los alrededores de la calle Ferraz, hay dos periodistas. Tal y como adelantó ayer torrevieja news today, se les imputan delitos de desorden público por, presuntamente, lanzar botellas a la Policía. Los periodistas, que trabajan en ‘El Mundo’ y ‘El Español’, niegan los hechos y afirman que estaban trabajando. Los hechos ocurrieron alrededor de las 23.00 horas de este miércoles en la confluencia de Juan Álvarez Mendizábal y Marqués de Urquijo. Los redactores, según los agentes, se habrían escondido en el portal donde fueron detenidos. ‘El Mundo’ y ‘El Español’ se plantean emprender acciones legales por detenciones ilegales y denuncias falsas contra la Policía Nacional.
El dispositivo 1.600 policías desplegados con motivo de la investidura -400 más que en 2016, cuando el presidente electo fue Mariano Rajoy- resultó suficiente disuasivo durante toda la jornada de este jueves para que los grupos más violentos no hicieran acto de presencia. El miércoles, uno de los elementos que tiene mayor capacidad de movilización en este ámbito (tiene 325.000 seguidores sólo en una red social), admitió implícitamente que no tenía capacidad de respuesta al publicar en sus redes sociales: “Vamos a “No estar donde el Estado espera que estemos (…) Cuando llegue el día, que esté cerca, nos levantaremos y actuaremos todos de una vez. Ayer reapareció para pedir que fueran una noche más a Ferraz y a protestar. en Sevilla en la ceremonia de los Premios Grammy Latinos.
Pese a todo, uno de los diputados socialistas, Herminio Sancho, tuvo que ser escoltado a su llegada al Congreso, tras recibir un impacto de huevo en la cabeza mientras desayunaba cerca de la Cámara Baja. Según confirmaron fuentes policiales a torrevieja news today y al propio Grupo Socialista, Sancho se encontraba en un bar con los diputados María Luisa García Gurruchaga, Daniel Senderos y Vicent Sarrià cuando un grupo de personas comenzó a acosarlos desde el exterior del establecimiento y, una vez fuera, a tirarles huevos. , uno de los cuales golpeó al diputado. Los agresores fueron identificados por la Policía y el PSOE afirma que presentará denuncia.
Al igual que en la entrada, las Fuerzas de Seguridad mantuvieron la Dispositivo en calle Cedaceros para facilitar la salida una vez finalizada la sesión de investidura. Un centenar de personas, convocadas por el Frente Obrero y la plataforma de la Junta Democrática, esperaron allí a los diputados, a los que tildaron de “traidores” y “usurpadores”, y lanzaron proclamas contra el sistema representativo español. En el extremo opuesto, cerca de la fuente de Neptuno, unas 200 personas se reunieron para protestar.