La Audiencia de Valencia ha condenado a cinco años de prisión al expresidente de la Diputación y del PP de la provincia de Valencia Alfonso Rus por la trama de los ‘zombis’ del caso Imelsa, la contratación irregular de directivos, asesores y trabajadores, entre 2004 y 2015, en esta empresa pública perteneciente a la corporación provincial y en Ciegsa, la empresa creada por la Generalitat para construir centros educativo. Algunos de estos fichajes incluso fueron remunerados sin realizar función alguna.
El exsecretario autonómico de Educación y exdirector general de la misma Máximo Caturlay el ex directivo de Imelsa y autoproclamado ‘adicto al dinero’, Marcos BenaventeTambién han recibido la misma pena de prisión.
Los tres están condenados por los delitos continuados de malversación en concurso con prevaricación y falsificación de documentos, aunque son absueltos de pertenencia a organización criminal. La sentencia de la Sección Segunda del Tribunal le impone también 14 años de inhabilitación y una multa de 5.400 euros.
se sentaron en el banco 25 acusados en el marco de las partes B y F del caso Imelsa. Seis han sido absueltos. Entre ellos, el ex subdelegado del Gobierno socialista en Valencia Rafael RubioTambién investigado en el caso Azud.
El resto está condenado a penas que van desde cuatro meses de suspensión de empleo o cargo público hasta cuatro años y cuatro meses de prisión y 17 años y seis meses de inhabilitación, por la comisión de delitos de falsificación de documentos o como cooperadores. necesaria de malversación y prevaricación.
La sentencia judicial de 156 páginas valora por todos los mitigación de retrasos indebidos y, para algunos de ellos, también los de confesión y reparación del daño. Asimismo, establece una indemnización de hasta 655.310 euros a favor de Ciegsa y más de 100.000 para Divalterra -sociedad sucesora de Imelsa- como responsabilidad civil individual.
La resolución judicial ha sido notificada este viernes a las partes y puede ser recurrida ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
Alfonso Rus mantuvo su inocencia durante el juicio celebrado entre enero y marzo de este año, en el que la Fiscalía pidió 12 años de prisión para el exalcalde de Xàtiva y líder del PP provincial en Valencia.
Le pagaron el salario a un jugador del equipo ruso
Los magistrados consideran probado que, en la mayoría de los casos, no existía una “necesidad real” de contratar trabajadores en ambas empresas públicas, que no realizaron “ningún proceso de selección basado en principios de publicidad, igualdad, mérito o capacidad”. y que lo basaron en la relación que tenían con funcionarios del PP o con los principales imputados.
Uno de esos empleados era un futbolista del Club Olímpico Xàtivapresidido por Alfonso Rus, que fue contratado como asesor en Imelsa por Marcos Benavent -a petición de Rus- para pagarle su sueldo como jugador de equipo.
Aunque algunos de los trabajadores nunca trabajaron para estas empresas, los responsables de la contratación firmaron certificados que decían lo contrario para “darles apariencia de legalidad”. También recibieron dieta sin justificación.
Rechazan la nulidad de los audios
Por otro lado, el tribunal ha rechazado la nulidad de los audios -utilizados como prueba- con conversaciones entre Benavent y otros interlocutores, grabados por él mismo. Unos archivos que su exsuegro copió sin su consentimiento y entregó a la exdiputada provincial Rosa Pérez Garijo, quien tomó ese memoria USB a la Fiscalía.
El fallo confirma que no se vulneró el derecho a la confidencialidad de las comunicaciones y “ninguna violación puede imputarse a los órganos encargados de la investigación”, ya que el proceso penal “se ha desarrollado sin vulneración de derechos fundamentales ni desequilibrios entre las partes”.