Un tribunal falló a favor del propietario y aprobó el desalojo del inquilino, que se negó a marcharse
El Mossos d’Esquadra Este viernes detuvieron a un vecino de Lloret de Mar (Gerona), de 75 años y nacionalidad suiza, que se había atrincherado en su casa con un arma larga para evitar ser desalojado. Fue gracias a la intervención de un mediador que el individuo, que acudió a apuntar con sus armas a los agentes, se entregó.
Esta mañana fue la tercer intento de lanzamiento durante las últimas semanas, luego de que el dueño del inmueble iniciara un procedimiento judicial por ello. Una sentencia del año pasado estableció que el hombre debía salir de la casa, pero él se negó. Tras lo ocurrido, el juzgado ha aplazado el desalojo y ha dado al inquilino diez días más para abandonarlo.
El despliegue contó con personal de seguridad ciudadana de la ARRO, así como el grupo élite de la Policía, el GEI y la unidad de secuestro y extorsión.
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