La Guardia Civil ha interceptado un velero con 700 kilogramos de cocaína que se encontraba apenas a 500 millas al noroeste de la isla de Gran Canaria. Con esta operación se ha desarticulado una organización criminal internacional responsable de la introducción de grandes cargamentos de cocaína a través de Canarias.
La investigación se inició en marzo de 2022, cuando la Unidad Central Operativa (UCO) detectó un velero de bandera polaca llamado ‘Rossio’ que habría establecido su base temporal en la isla de Gran Canaria y sobre el que, mediante intercambios de información con la policía de Croacia, se sospechaba que podría utilizarse para transportar cocaína desde América del Sur.
Llevaban algún tiempo bajo investigación.
Así comenzaron a monitorear las actividades de la tripulación, dos ciudadanos italianos vinculados a la ‘Ndrangheta y un croata estrechamente vinculado al “Cártel de los Balcanes”. Durante los meses siguientes se pudo comprobar cómo estas personas, sin ejercer ningún tipo de actividad profesional, conseguían mantener un alto nivel de vida, dedicándose exclusivamente a mantener el velero en óptimas condiciones, realizando pequeñas salidas esporádicas, intentando así demostrar una aparente normalidad.
No fue hasta el 27 de julio de 2023 cuando se detectó una insólita travesía en la que el velero ‘Rossio’, con los dos tripulantes italianos a bordo, iniciaba navegación hacia el oeste, recorriendo más de 750 millas náuticas, en un itinerario por las Islas Canarias que tuvo su destino en un punto aislado del Océano Atlántico y desde donde inició su regreso el 2 de agosto.
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Tres días después, el 5 de agosto, el velero fue abordado a una distancia aproximada de 500 millas al noroeste de la isla de Gran Canaria y en su interior se encontraron numerosos bultos que arrojaron un peso final de 700 kilogramos de cocaína.
Al mismo tiempo, en Las Palmas de Gran Canaria, el ciudadano croata y un serbio que presuntamente coordinaban la operación desde tierra y que en el momento de la detención portaban los teléfonos desde los que darían instrucciones a la tripulación, fueron arrestados.
Esta investigación corrobora la estabilidad en el tiempo de las grandes organizaciones criminales europeas, que son capaces de desplegar a su personal en diferentes localizaciones durante largos periodos de tiempo, y la importancia geoestratégica de Canarias en el tráfico marítimo de drogas.
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