Renfe vende billetes de Ourense a Zamora más caros que a Madrid



La polémica quedó servida en Zamora: Viajar entre Madrid y esta ciudad en alta velocidad es, en ocasiones, más caro que viajar a Ourense. Algunos zamoranos optan por coger un billete con destino a la ciudad de As Burgas y bajarse en la capital zamorana. Desde la ciudad de As Burgas se produce la misma situación en algunas frecuencias, algo que afecta especialmente a quienes no tienen abono Avant.

El motivo de esta situación está en el sistema de tarificación establecido por Renfe para las líneas de Larga Distancia, al que denominan “Gestión de ingresos”. Es “el mismo que el de las compañías aéreas”, afirma el operador ferroviario. Este sistema busca maximizar la rentabilidad de las operaciones en plena liberalización ferroviaria, tras la llegada de empresas rivales como la francesa SNCF -a través de su marca Ouigo- o ILSA -Iryo-.

¿Cómo funcionan los precios?

Los precios de cada billete de tren se establecen en función de varias variables. Aunque no se publican en profundidad los entresijos de este sistema, el jefe de equipo del departamento de Revenue Management de Renfe, Gonzalo Romero, explica algunas líneas generales en un blog de la empresa. Uno de ellos es “saber cuánto está dispuesto a pagar el viajero”. Las fluctuaciones de precios dependen del momento de la compra, del perfil del cliente y de la demanda existente en determinadas fechas.

Y del destino. Por ejemplo, ayer por la tarde costaba 72,90 euros viajar a Ourense desde Madrid el 20 de diciembre a las 17.45 horas. Sin embargo, hacia Zamora el precio se disparó hasta los 94,55 euros. En algunas frecuencias ni siquiera permitía reservar plazas para Zamora, mientras que sí lo permitía para la ciudad de As Burgas.

Nadie se pregunta cómo funcionan los sistemas de fijación de precios de las aerolíneas”, afirman fuentes de Renfe, que destacan la complicación de establecer comparaciones entre precios y destinos.

Aún le faltan rivales en Galicia

Renfe fija los precios del tren de alta velocidad a Galicia en un marco de plena competencia. Aunque, por el momento, la empresa no tiene rivales. La liberalización del transporte ferroviario de viajeros obliga al operador público a buscar la máxima rentabilidad en sus servicios, aunque disfruta del monopolio en la línea a Madrid. Sin embargo, esta situación podría tener las horas contadas. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias prepara la segunda fase de liberalización, algo que incluiría la LAV Madrid-Galicia. Ya han mostrado su interés empresas como Alsa o ILSA (Iryo), que pretenden circular por el corredor. Es posible que Renfe contraataque estableciendo más frecuencias e incorporando el servicio “low cost” Avlocomo ya ocurre en otras líneas españolas en las que no está solo.

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