De los investigados, 15 han estado en la provincia de Granada, 18 en Jaén, 12 en Sevilla, seis en Córdoba, cuatro en Almería y tres en Málaga.
Estas acciones fueron firmado y sellado por un veterinario de Úbeda (Jaén) quien, sin haber visto a ninguno de estos perros y sin aportar el informe que justificara tales mutilaciones, firmó los registros veterinarios y alegó en ellos lo siguiente: “Corte de orejas y cola para funcionalidad bajo anestesia”.
La investigación del Seprona
La investigación comenzó hace más de un año cuando el Seprona Comenzó a identificar esta práctica en las localidades granadinas de Domingo Pérez y Picena. A su vez, otra patrulla en Sevilla informó de hechos similares en cachorros en Cazalla de la Sierra, lo que aumentó las sospechas.
En este último caso, las fechas de las intervenciones que aparecían en las tarjetas eran incompatibles con el lesiones presentado por los animales, que parecían muy recientes. Siguiendo estas pistas, comenzaron a investigar e inspeccionar más de 2.000 perros y finalmente descubrieron 1.111 perros mutilados ilegalmente. Además, tras inspeccionar la clínica veterinaria del detenido, los agentes comprobaron que las instalaciones no estaban preparadas para realizar este tipo de intervenciones con las mínimas garantías.
Esta práctica es ilegal en España desde 2018
El corte de orejas y colas en perros de raza pura era una práctica común por parte de los dueños para evitar que las zarzas u otros arbustos dañen a los animales. Estaba totalmente prohibido desde el 1 de enero de 2018 cuando España ratificó el Convenio del Consejo de Europa sobre protección de mascotas.
Están totalmente prohibidos por razones esteticas o sin uso alguno, deberá estar debidamente justificado por una clínica veterinaria y realizarse en condiciones higiénico-sanitarias adecuadas.
Él delito de maltrato animal con lesiones se castiga con penas de hasta 18 meses de prisión o multa de hasta 12 meses. En todos los casos se establece la pena de inhabilitación para posesión, profesión, oficio o comercio que tenga que ver con animales. Además, existen circunstancias factores agravantes eso podría aumentar la pena a más de dos años y provocar que quien la cometa vaya a prisión.