El juicio contra una pareja de origen colombiano por la llesiones, fracturas, hemorragias y abusos infligidos, presuntamente, a sus dos hijos, de un año y dos meses de edad cuando ocurrieron los hechos, se celebra este martes 21 de noviembre, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
La audiencia oral, que cse celebrará ante el Juzgado de lo Penal 3 de Valladolid,Hasta la fecha ha sufrido hasta tres suspensiones por diferentes motivos. Cada uno de los acusados se enfrenta a una posible pena global de 47 años de prisión.
En el banquillo se sentarán OAOR y su pareja MCM, de 32 y 24 años, respectivamente, a quienes la Fiscalía imputa seis delitos de lesiones en el ámbito familiar al mayor de sus hijos, ahora de 4 años; otros tres delitos de la misma naturaleza contra la menor, que ahora tiene 3 años, y un delito de maltrato, con el agravante de parentesco.
Para cada uno de los delitos de lesiones, la fiscalía solicita cinco años de prisión -un total de 45 años de prisión- y dos años más de prisión por el delito de maltrato habitual, así como la inhabilitación para ejercer la patria potestad durante cinco años. así como la prohibición de comunicarse y acercarse a sus hijos durante 13 años.
En materia de responsabilidad civil, se solicita que compensen, solidariamente, con 5.310 euros al mayor de los hijos por lesiones y deformidad de clavícula y con más de 18.000 euros al menor, además de otros 10.000 a ambos. por daños morales.
Los acusados llegaron desde su país de origen a Madrid el 25 de diciembre de 2018 a través de un Programa de protección de refugiados de la Cruz Roja. El 13 de marzo de 2019 fueron trasladados a Valladolid, primero a un piso de la calle Neptuno y luego a un piso del paseo Juan Carlos I de la capital.
La pareja, fruto de su relación sentimental, tuvo dos hijos y aunque su condición de refugiados les permitía recibir atención sanitaria, sin embargoo hubo pocas citas médicas a las que asistieron con los niños a pesar de que el pediatra había insistido en su importancia, así como en la conveniencia de seguir las pautas de vacunación, abordar la importante desnutrición que presentaba el niño y citas con neurología para solucionar el problema de deambulación que presentó el primer niño.
Lejos de cumplir con sus obligaciones como padres, la Fiscalía sostiene que ambos provocaron múltiples fracturas óseas a los niños, lesiones que no fueron tratadas médicamente y que en algunos casos eran claramente visibles.
Las lesiones fueron detectadas por el neurólogo infantil, que, luego de examinar al mayor de los menores y tratar de resolver por qué tenía un retraso psicomotor, verificó el estado en que se encontraba y decidió examinar también al recién nacido; confirmando que ambos eran sospechosos de abuso.
En concreto, el mayor de los hermanos, que en el momento de su ingreso hospitalario, el 23 de mayo de 2019, tenía 14 meses, presentaba, además de desnutrición y retraso psicomotor, fracturas en los extremos distales de ambos fémures, los extremos proximales de ambas tibias y una fractura diáfisis-metáfisis de ambos húmeros, todos ellos en distintos estadios evolutivos.
La víctima requirió tratamiento médico para recuperarse, además de un tiempo de curación de dos días de daño muy grave y 180 días de daño grave, pese a lo cual Las consecuencias han sido un acortamiento de la extremidad izquierda. (disemetría) y una angulación del fémur izquierdo, visible a simple vista y que provoca cojera. Tal limitación no es definitiva dado que se encuentra pendiente de cirugía.
El otro niño, de dos meses de edad, presentaba una hemorragia conjuntival en el ojo izquierdo y una fractura desplazada del tercio medio de la clavícula izquierda no consolidada, además de un callo de fractura en la vertiente posterior de la undécima costilla izquierda, una fractura en arco costal posterior de undécima costilla derecha no consolidada, hipotonía generalizada, mala movilidad de las extremidades y nula movilidad de la extremidad superior izquierda.
Todas estas lesiones requirieron tratamiento médico además de un tiempo total de curación y/o estabilización de 15 días de daño básico, 42 días de daño moderado y dos días de daño grave, dejando como consecuencia una deformidad a nivel de la clavícula izquierda. .
A consecuencia de estos hechos, el Juzgado de Instrucción número 4 de Valladolid, en virtud de auto de 24 de mayo de 2019, suspendió a ambos demandados del ejercicio de la patria potestad y les impuso provisionalmente la prohibición de acercarse a menores, mientras se tramitaba este trámite.
Por su parte, la Gerencia de Familia e Igualdad de Oportunidades de Castilla y León, en virtud de resolución de 23 de mayo de 2019, ddeclaró a los menores indefensosasumiendo la tutela legal, accediendo primero al acogimiento residencial y luego al acogimiento familiar.