Acerca de trece mil profesores valencianos interinos Aún no conocen su destino para el próximo curso escolar, a diez días de tener que volver a las aulas. Persiste el fallo informático que obligó a corregir las listas publicadas hace dos semanas para asignar las 21.800 plazas ofertadas y las plantillas de los centros públicos siguen incompletas. Desde el Departamento de Educación esperan que “en breve” puedan ofrecer una respuesta definitiva, al menos, para Primaria y Secundaria.
Aunque con algunos errores a la hora de ordenar a los aspirantes, que se siguen corrigiendo, 8.800 funcionarios sin puesto fijo de los distintos organismos ya conocen el lugar donde impartirán las clases. Sin embargo, las dos listas más extensas aún no han recibido luz verde:uno para profesores y otro para profesores– Correspondiente al personal que se encuentra en el mercado de valores y que cubre las vacantes existentes.
Aunque se esperaba que pudieran estar listos este lunes, ese plazo no se pudo cumplir, ya que los errores provocados por el sistema utilizado persistieron en los borradores enviados por el departamento que dirige José Antonio Rovira a los sindicatos. El nerviosismo cunde entre quienes tienen que buscar alquiler, conciliar su vida laboral con la personal y preparar los contenidos del nuevo curso, que comienza el 1 de septiembre para profesores y el 11 para los estudiantes.
El problema: un programa informático que data de 1999 y que no reconoce algunos datos. Pese al aviso de los técnicos en 2020, no se renovó ni implementó otra herramienta con mayor capacidad ante las “nuevas variables” que han acabado irrumpiendo en un proceso complejo, según explicó este martes el subdirector de Profesorado. José Pascual Hernández. “Durante doce días han estado intentando que los algoritmos coincidan”, ha subrayado, al tiempo que ha garantizado que el fallo está “en proceso de solución”.
Imagen del subdirector de Profesorado, José Pascual, este martes compareciendo ante los medios
El mayor obstáculo reside en la Adjudicación de mil plazas para profesores técnicos de formación profesional que, como consecuencia de la Ley Celaá, pasan al cuerpo de profesores de Educación Secundaria. El sistema utilizado no logra cotejar los datos de los postulantes con los puestos a adjudicar porque no estaba preparado para ello. No se probó ni se realizó “ninguna simulación”Según Pascual.
No ha sido el único desfase que no estaba previsto: el concurso de estabilización de funcionarios también ha supuesto que miles de interinos cambien su relación jurídica a funcionarios de carrera, sin pasar por los habituales procesos de oposición y prácticas.
El actual gobierno de PP y Vox atribuye este caos a una falta de planificación que los anteriores responsables del PSPV y Compromís rechazan y critican. Mientras tanto, los sindicatos siguen esperando respuestas en las puertas del Ministerio, mientras se centran en las “numerosas deficiencias” que quedan por solucionar en las listas ya publicadas. Advierten de que “un gran número de centros” no iniciarán las clases con el personal suficiente.
Desde STEPV, organización mayoritaria, exigirá a la Generalitat una indemnización por los “daños” causados a los docentes afectados por lo que consideran “tonterías”. Al “estrés” y los “efectos directos sobre la salud psicoemocional” de los profesionales en vacaciones, CCOO suma otro componente: el retraso que estas adjudicaciones pueden provocar en la gestión de nóminas.