Hasta por seis denuncias Asaja Castilla y León que el precio de las patatas se multiplica desde que sale del campo hasta que el consumidor recibe un kilo del tubérculo. Si él el agricultor recibe entre 0,25 y 0,35 euros por kilo, dependiendo de la variedad, en caja, el precio es en entre 1,70 y 1,80 eurosLo ha constatado la organización agraria, por lo que exige “responsabilidad” al repartidor para que “pague a la agricultura de forma justa” y “sin inflar el precio”.
Y es que, censura la organización, han detectado Precios “inusualmente altos” en buena parte de la gran distribución«, que ofrece la »patata nueva española«, ahora en plena campaña de recolección en Castilla y León, a cifras muy superiores a lo que reciben los productores por la materia prima.
“Es importante que la cadena alimentaria funcione remunerando cada enlaceempezando por el agricultor, pero también parece excesivo que el consumidor paga seis veces más de lo que se paga en el campo por la patata”, censura el presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo. “Alguien se está haciendo más rico de lo necesario”“, advierte el dirigente agrario, quien, para resaltar la diferencia entre el campo y la mesa, también hace las cuentas de los ingresos que obtendrán los agricultores y de lo que pagarán los consumidores por lo que es un alimento básico en la dieta.
Si en Castilla y León los agricultores que cultivan el tubérculo Recibirán unos 240 millones de euros. Esta campaña los consumidores pagarán 1.200 millones. «Estas tensiones de precios son pan para hoy y hambre para mañana, peor al final provocan cambios en el consumo y el recurso a importaciones de menor calidad que no queremos”, advierte Dujo, quien alerta de que los productores »apenas recibimos lo necesario para compensar los costes de producción y nuestro trabajo«.
Así, el presidente autonómico de Asaja destaca que este umbral de entre 25 y 35 céntimos por kilogramo es el “mínimo” que debería recibir el agricultor para compensar al menos el “altos costos” de producción -semillas, riego, fertilizantes, fitosanitarios…-, que rondan los 20 céntimos.
Y Castilla y León tiene mucho que decir en el sector de la patata, recuerda, bueno produce el 40% del tubérculo español. En plena campaña de arranque hay unas 17.000 hectáreas plantadas, eso sí, “lejos” de las más de 20.000 que había hace unos años y que se han quedado atrás por la baja rentabilidad. Valladolid, con casi 4.800 hectáreas, y Salamanca, con cerca de 2.300, son las principales productoras del tubérculo, presente en los cultivos de las nueve provincias.